La deficiencia de vitamina D podría ser un factor en común entre quienes presentan un cuadro grave por coronavirus.
Así lo estima un nuevo estudio cuyos resultados han sido publicados en el Journal of Clinical Endocrinology & Metabolism de la Endocrine Society.
El trabajo señala que el 82,2% de 216 pacientes del Hospital Universitario Marqués de Valdecillo en Santander, España, mostraban una deficiencia de esta vitamina. De acuerdo a los análisis, los hombres fueron quienes presentaban niveles más bajos en comparación a las mujeres.
Según recoge el sitio El Mundo, otros estudios anteriores también habían mostrado resultados similares. En ese sentido, Francisco Javier Escalada, director de Endocrinología de la Clínica Universidad de Navarra y presidente de la Sociedad Española de Endocrinología y Nutrición, destacó otra investigación reciente en la que se realizó un ensayo clínico, administrando la llamada “Vitamina del Sol” a pacientes con covid-19.
El experto indicó que los resultados mostraron que “los ingresos en UCI disminuyeron, mientras que los pacientes que no recibieron el medicamento ingresaron de forma mucho más frecuente e incluso la tasa de mortalidad fue mayor”.
Para Escala, “un 80% de prevalencia es un porcentaje brutal”, razón por la que agregó que ya se han iniciado ensayos clínicos con un número más amplio de enfermos para analizar si la administración de vitamina D podría eventualmente ser “un arma terapéutica para mejorar la evolución clínica de estos pacientes con covid”.
Por su parte, otro estudio realizado por científicos de la Universidad de Turín señala que quienes tienen niveles saludables de vitamina D en el organismo, podrían verse beneficiados a la hora de combatir el coronavirus. La investigación indicó que si bien este nutriente no es una cura a la enfermedad, reduce el riesgo de agravarse.
En el reporte se afirma que en Turín, los pacientes hospitalizados por covid-19 solían tener bajos niveles de vitamina D, consignó Infobae.
“La compensación por esta deficiencia generalizada de vitamina puede contrarrestarse en primer lugar, exponiéndose a la luz solar tanto como sea posible, incluso en balcones y terrazas, ingiriendo alimentos ricos en vitamina D y, bajo supervisión médica, tomando preparaciones farmacéuticas específicas”, explican los investigadores.
Tal como hemos explicado anteriormente, la vitamina D es una hormona que, en forma natural, se obtiene a través de la exposición directa de la piel a los rayos UVB del Sol.
Su escasez tiene múltiples consecuencias en nuestro organismo ya que es la encargada de varios procesos biológicos, como promover la retención y absorción de calcio y fósforo, principalmente en los huesos.
También interviene en diversos sistemas de nuestro organismo, como la salud mental y, recientemente, a raíz de la pandemia por covid-19, también se destaca su acción en el sistema inmune.
Aunque la vitamina D se obtiene principalmente del Sol, hay algunos alimentos que también proveen este importante nutriente, tales como la leche, jugos, yogurt y cereales fortificados y los pescados grasos como salmón, atún y caballa.
También está presente en otros alimentos, pero en valores más bajos, como la yema del huevo, champiñones, hígado de res y queso.
Además existen suplementos de vitamina D que se pueden adquirir en farmacias o tiendas deportivas, pero estos están destinados a quienes realmente tienen deficiencia del nutriente.