Posterior a esto, tuvimos que esperar seis meses para poder contar con el reglamento que especificara la forma correcta de realizar el grabado, esto a pesar de que muchos dueños de automóviles ya estaban grabando sus autos desconociendo si estaría acorde con la ley o no.
Como empresa esperamos expectantes la publicación de este reglamento, ya que trabajamos en la industria del grabado de placas patentes hace diez años. Conocemos el mercado, lo que ofrece y qué es mejor para los usuarios.
Sin embargo, al recibir el documento encontramos varias deficiencias o “vacíos legales”. Por ejemplo, se permita el uso del grabado con arena y cuarzo, siendo que el uso de estos materiales está prohibido de acuerdo a una ordenanza del Ministerio de Medio Ambiente por ser nocivo para la salud ¿A quién hacemos caso entonces? ¿con qué ley cumplimos?
Si continuamos analizando el reglamento, tampoco podemos dejar de mencionar nuestra sorpresa al saber que el grabado por puntos está autorizado, teniendo en cuenta que este atenta contra las propias guías de la normativa: un grabado que sea definitivo y no se pueda adulterar, ambas características que la marcación realizada por puntos no posee, ya que es muy fácil modificarlo y aún más fácil borrarlo.
Entonces, nuevamente nos preguntamos lo mismo ¿Cómo podemos cumplir la ley si esta misma se contradice? ¿Qué mensaje le entregamos a las personas?
Otras inconsistencias
Pero estas especificaciones técnicas parecen no tener sentido al continuar leyendo el reglamento. Su artículo cuarto establece que a los autos que ya cuenten con su patente grabada sólo se les pedirá que esta sea legible, no que vaya acorde a las especificaciones antes mencionadas. Pero ¿cómo se puede saber si un auto fue grabado antes o después de la promulgación de la ley?
No existe una forma concreta de hacerlo, abriendo una ventana a que la gente grabe su patente de cualquier manera, sin apegarse al reglamento y en caso de ser sorprendidos, solamente acusar que lo hicieron antes de tener conocimiento de la normativa. La historia nos ha enseñado que estos vacíos se pueden prestar a malas prácticas.
Sabemos que ninguna ley será perfecta, que siempre existirán detalles que mejorar. En este sentido, si bien nos sorprendió la decisión del Ministerio de Transportes y Telecomunicaciones de retirar el reglamento de Contraloría para poder realizar modificaciones.
Estamos expectantes, esperando que se puedan tomar en cuenta esta y otras correcciones que mejoren la normativa existente y que cumplan el fin último de ésta.
Y aunque creemos que los cambios a realizarse podrían ser menores, para que después el reglamento y la ley sigan con su curso natural, sí esperamos que estos estén sustentados en lo que nosotros y otras empresas hemos manifestado, que escuchen a todos los actores de la sociedad, en este caso tanto a los que grabamos automóviles como a los usuarios que deben grabar sus vehículos.
Por nuestra parte, y en la espera de la promulgación del reglamento modificado, continuaremos trabajando con nuestras franquicias a nivel nacional y educando a la gente para que elija detenidamente lo mejor y más seguro del mercado.
En esta línea, es que queremos reiterar a los usuarios que se tomen el tiempo pertinente al momento de elegir un tipo de grabado, que no sólo se inclinen por lo más económico, ya que al fin de cuenta lo barato puede salir muy caro.
Por: Manuel Aspe
CEO de Gravat