A mi juicio y, tomando en cuenta mi experiencia, uno de los aspectos más relevantes de la Operación Renta 2024 es la necesidad de fortalecer la fiscalización y control de los contribuyentes. En los últimos años, se ha evidenciado la existencia de prácticas de evasión y elusión fiscal que afectan negativamente la recaudación de impuestos y la distribución de la carga tributaria.
Es fundamental hoy, que las autoridades fiscales implementen medidas efectivas para combatir estas prácticas y garantizar que todos los contribuyentes cumplan con sus obligaciones tributarias, lo que implica una mayor inversión en tecnología y recursos humanos, así como una mayor coordinación entre los distintos organismos encargados de la fiscalización.
Otro aspecto relevante de la Operación Renta 2024 es la necesidad de promover la equidad en el sistema tributario. En Chile, existe una gran brecha entre los contribuyentes de altos ingresos y los de bajos ingresos, lo que genera una distribución desigual de la carga tributaria. Es necesario implementar medidas que permitan reducir esta brecha y promover una mayor equidad en el sistema.
¿Cómo poder lograrlo? Una de las vías podría ser la implementación de impuestos progresivos que gravan más a quienes tienen mayores ingresos, revisando eliminación de exenciones y beneficios tributarios para algunos tramos.
Con la implementación de estas medidas y la promoción de transparencia en esta nueva Operación Renta, los contribuyentes podrán no sólo aprovechar la información acerca de las declaraciones, sino también comprender el proceso, y las políticas y criterios utilizados por las autoridades fiscales.
Porque, si logramos un ecosistema en el que los contribuyentes conozcan a cabalidad el proceso, y se generen certezas impuestos se utilizan de manera eficiente y en beneficio de toda la sociedad, tendremos un país que disminuya la brecha de impuestos gracias a la transparencia de un sistema tributario justo, fiscalizado y conocido por sus beneficiarios y contribuyentes.