Recientemente el Fisco de Chile, a través del Consejo de Defensa del Estado (CDE), inició una acción judicial tras detectarse que el MOP estaba pagando al privado Bodegas San Francisco un valor superior al que correspodía, por una expropiación de un terreno de 42.963 m2 de su propiedad, ello para el desarrollo del enlace vial Ruta 78-68, en la comuna de Maipú. La tasación de $ 2.420 millones por dicho terreno para pagar la indemnización fue elaborada por los peritos a fines del año 2021, gobierno de Piñera,

El precio comercial que se debía pagar a esa empresa era del orden de los $ 390 millones, conforme a los correctos análisis respectivos, ello teniéndose en cuenta que la anterior comisión tasadora no consideró las restricciones normativas que gravan el inmueble expropiado. Por ello el CDE afirmó “Es decir, el terreno se tasó en mucho más que su valor de mercado”.

El organismo público que cautela el interés fiscal expresó “el lote en cuestión es parte de un predio ubicado en un área de extensión urbana de la comuna de Maipú, que se emplaza en una zona de riesgo por inundación recurrente y afecto a utilidad pública por la apertura de una nueva vialidad, como Camino La Farfana, Camino el Descanso y Costanera Interior”.

Asimismo el CDE enfatizó que, al no estar urbanizado el predio, carece de desarrollo inmobiliario habitacional, lo que aparentemente desconocían los peritos tasadores anteriores y por ello ese CDE fue lapidario al manifestar que se debe evitar el enriquecimiento injusto por parte del expropiado.

En enero pasado publicamos en esta tribuna, dando a conocer las normas urbanísticas pasadas y presentes, desde el año 1960 a la fecha, en los instrumentos intercomunales y comunal, la columna de opinión “Una tasación equivocada en Las Condes que favorece a Copec”, ver link, en la cual nos referíamos a la expropiación, por parte del MOP, de un terreno que ocupaba de facto, pues el uso de suelo lo impedía, la empresa Copec en esa comuna, predio en donde se va a construir una estación de la Línea 7 del Metro.

Los tasadores habían resuelto, una alta indemnización al privado expropiado, porque desconocían las restricciones contenidas para ese predio en el Plan Regulador Intercomunal de Santiago (PRIS), Plan Regulador Metropolitano de Santiago (PRMS) y en el Plan Regulador Comunal (PRC) de Las Condes, razón más que suficiente para que la fundación Defendamos la Ciudad denunciara ese craso error en la Contraloría General de la República, la que decidió no pronunciarse por tratarse, según ella, de un asunto litigioso (sic).

En vista de lo anterior, esa organización ciudadana el 09/02/2023 le envió al jefe de la Unidad de Medio Ambiente del CDE, el texto de la denuncia ingresada en la Contraloría y su respectiva respuesta, solicitándole que se la reenviara a la Unidad de Expropiaciones del CDE, pues la excesiva indemnización contenida en el decreto exento N° 1.503 de 2022 del MOP a la empresa Copec, era absolutamente improcedente.

Se le informó al CDE que, para evitar una lesión enorme en contra del fisco, su Unidad de Expropiaciones, conforme al DL N° 2.186 de 1978, deberá analizar la materia, teniendo presente que el uso de suelo del terreno expropiado en Las Condes impide la actividad inmobiliaria, es decir, se trata de un caso similar al de Maipú.

En las últimas semanas la prensa ha cubierto lo que acontece con la curiosa compra de una clínica en un alto precio, por parte de la Municipalidad de Santiago, cuya alcaldesa justifica ese monto porque tres peritos tasadores así lo habían resuelto. La primera en objetar la transacción comercial fue la concejal independiente de izquierda, Rosario Carvajal, la que, nos consta, sí tiene un conocimiento acabado de estas cosas.

Tenemos la impresión que la adquisición de la famosa clínica en la comuna de Santiago se tendrá que anular pues Luis Maldonado, juicioso Conservador de Bienes Raíces de Santiago, se negó a inscribir su dominio, aunque cabe la remota posibilidad de que se le compre a un precio justo, con informes de avalúos de otros tasadores o bien que se busque un distinto inmueble.

Ya que estamos hablado de tasadores incompetentes, es conveniente que los lectores revisen el episodio Caval del otrora feliz matrimonio Dávalos-Compagnon, respecto a como el Banco de Chile, sin las garantías necesarias, les prestó una suma importante de plata para el negocio inmobiliario, con cambio de uso de suelo, que emprendieron en la comuna de Machalí, ver link.

Por lo relatado en estos 4 episodios, es urgente que exista una completa reingeniería en el espacio de estos peritos tasadores, con el consiguiente control de una entidad preparada para evitar que en el futuro se repitan estos mendaces despropósitos.