Durante los últimos días se reportó que un 90% de la producción de cerezas que se producen en Chile tienen como destino China, ante esto se produjo una noticia falsa que dio cuenta de la supuesta destrucción del fruto chileno debido a posibles trazas de Covid-19 en ellas.
Sin embargo esa situación fue desmentida por la Embajada chilena en China, ya que afirmaron que no habían sido informados de esto y que las frutas no serían de origen chileno.
En conversación con Expreso Bío Bío, el presidente de la Asociación de Exportadores de Fruta de Chile (Asoex), Ronald Bown, se refirió sobre los cargamentos de la fruta y su comparación con la crisis de la uvas envenenadas en 1989.
“Estamos en una situación muy complicada del punto de los mercados (…) estamos en una campaña hace tres días buscando informar a la gente adecuadamente”
Asimismo aseguró que tanto los productos, como los trabajadores y los embalajes tienen un control sanitario adecuando para el envío de frutas al extranjero. “Hay autoridades Chinas que han encontrado trazas de covid no en las cerezas (chilenas), sino que en los envases”, explicó.
También informó que las frutas no son trasmisoras de covid, “no tenemos la responsabilidad, han habido informaciones que no han sido desmentidas y han ocasionado problemas en los mercados”, opinó Bown.
Año Nuevo Chino
El próximo 12 de febrero se celebra el Año Nuevo Chino donde Chile cada año ve un mercado, ya que los habitantes del país – en esa fecha – consumen cerezas como tradición.
“Uno pudo decir que se pudieron hacer cosas con anterioridad, pero para qué llorar sobre la leche derramada (…) pensamos que se está haciendo todo lo posible y que las soluciones sean más rápidas”, así confirmó que el presidente de la República está al tanto del caso y su pronta resolución.
¿Cómo impacta al mercado?
Los cargamentos de cerezas están siendo exportadas a través de barcos, sin embargo con esta situación, las frutas tendrían una baja en su consumo como también en su precio lo que afecta al mercado y los productos que ya están siendo vendidos y trasladados.
“En el Año Nuevo Chino deberíamos vender alrededor de 550 contenedores diarios, ahora se está vendiendo menos del 10%”, indicó el presidente de la Asoex.
Finalmente Ronald Bown admitió que, “yo diría que es peor que las uvas envenenadas. Aquí podría haber una situación mucho más compleja”.