En los últimos días se dio a conocer que la Oficina de Protección a los Refugiados y Apátridas de Francia decidió entregarle asilo político a Ricardo Palma Salamanca y su familia.
Palma Salamanca fue condenado en Chile a presidio perpetuo por el asesinato del senador Jaime Guzmán y el secuestro de Christian Edwards. No obstante, no ha cumplido la condena porque ha estado fuera del país.
En conversación con el Expreso Bío Bío, el director para América Latina de Human Rights Watch, José Miguel Vivanco, señaló que se trata de una decisión “incomprensible e injustificable a lo menos respecto a los antecedentes que uno maneja”.
Además catalogó que el asilo político corresponde a “una institución sagrada de derecho internacional dirigida a proteger a víctimas de persecuciones políticas”.
“Es muy difícil dilucidar cuáles son los fundamentos que se tuvieron a la vista para otorgarle el asilo político (…) tienen que haber argumentos jurídicos de peso”, añadió.
Vivanco mencionó que “da la impresión que si ese beneficio se mantiene, es imposible que se le conceda la extradición por las autoridades judiciales”.
Sobre el actuar de esta oficina, Vivanco señaló que “uno no puede criticar a priori y decir que se manejan con criterios de izquierda o de derecho (…) antes de emitir un juicio hay que verificar si efectivamente la práctica muestra un sesgo político”.