Por Álvaro Soto, Director del Centro Nacional de Inteligencia Artificial
Gabriel Weintraub, Profesor Titular de la Escuela de Negocios de la Universidad de Stanford

La Inteligencia Artificial (IA) Generativa, capaz de crear imágenes, videos y textos, está transformando el mundo del trabajo. Su impacto divide opiniones: algunos ven un futuro lleno de oportunidades, mientras otros temen un escenario desigual. Sin embargo, el futuro no está escrito, y la evolución de la IA dependerá de las decisiones que tomemos en los sectores público y privado. Por eso, es clave contar con diagnósticos respaldados por datos reales que guíen decisiones responsables.

El Centro Nacional de IA (CENIA), Futuro del Trabajo SOFOFA Capital Humano y académicos de Stanford, junto al Ministerio del Trabajo y SENCE, realizaron un estudio que analiza el potencial de lA Generativa en la mejora de la eficiencia y la calidad laboral. Y los resultados fueron contundentes: gracias al uso de herramientas de IA Generativa, alrededor de 4,7 millones trabajadores -es decir, casi la mitad de la fuerza laboral chilena- podrían acelerar significativamente más del 30% de las tareas que realizan rutinariamente.

Para cuantificar esta oportunidad, si mágicamente pudiésemos implementar de forma inmediata y sin costos las oportunidades de aceleración identificadas, el valor generado equivaldría al 12% del PIB nacional.

Para llegar a estos resultados, nuestro estudio analizó las 100 ocupaciones más comunes de Chile, que abarcan al 62% de los trabajadores del país, y desglosó cada ocupación según un universo de 2.600 posibles tareas, con el fin de evaluar si la IA Generativa podía acelerar de manera significativa cada una de estas. Luego, se integró los impactos a nivel de cada tipo de empleo, ampliando así el análisis para identificar tendencias por sectores.

Según los principales hallazgos del estudio, hay medidas concretas que sugerimos impulsar.

Aprovechar los beneficios inmediatos de la Inteligencia Artificial

Lo primero, es aprovechar los beneficios inmediatos del uso de herramientas de IA Generativa ya disponibles en el mercado y que pueden aumentar significativamente la productividad en ocupaciones que utilicen en forma intensa tareas como la digitación de información, la programación, el apoyo a la atención de clientes, la generación de visualizaciones y reportes, y la búsqueda de información.

Luego de estos “quick wins”, el siguiente paso es enfocarse en innovaciones que requieran herramientas específicas adaptadas a tareas puntuales, por ejemplo, desarrollar variantes de Chat-GPT para apoyar tareas de análisis de datos en dominios específicos.

IA en el sector público

En segundo lugar, está el detectar sectores clave para enfocar esfuerzos, como el sector público. A modo de ejemplo, el estudio muestra que el 31% de las tareas de empleados públicos pueden acelerarse con IA Generativa, reduciendo la burocracia y aumentando la productividad del Estado.

La educación también puede ser un área altamente beneficiada, ya que entre el 65% y el 75% de las tareas de los docentes, como las administrativas, pueden acelerarse, permitiendo más tiempo para la enseñanza y la interacción con estudiantes.

El sector de las Pymes también puede impulsar su competitividad, gracias a que un 44% de sus tareas puede optimizarse.

Capacitación para trabajadores

Un último punto en el que aconsejamos enfocar la atención, es en la capacitación para una adopción efectiva de los trabajadores, lo que implica cuatro aspectos esenciales:

    – En primer lugar, es necesario entrenar las habilidades digitales, familiarizando a los trabajadores con herramientas y plataformas de IA Generativa para asegurar el aprovechamiento de esta tecnología.

    – En segunda instancia, es clave impulsar el avance de herramientas especializadas, lo que supone adoptar, adaptar y desarrollar herramientas de IA para usos específicos y en diversos sectores, garantizando que estas tecnologías sean relevantes, efectivas y adecuadas a las necesidades particulares de cada contexto.

    – Un tercer aspecto, considera el fortalecimiento de habilidades humanas irremplazables para lo cual es necesario fortalecer la capacitación en competencias que la IA no puede replicar, como la interacción humana, el liderazgo, la empatía y las habilidades blandas. Esta potenciación debe comenzar desde la educación escolar, promoviendo también el desarrollo del pensamiento crítico.

    – Y un cuarto elemento clave es enfocarse en lo creativo y relacional para que profesionales como psicólogos, kinesiólogos y arquitectos -entre otros- puedan delegar tareas administrativas a la Inteligencia Artificial y dedicar más tiempo a actividades relacionales y creativas.

El mensaje es claro: no se trata de reemplazar personas, sino de empoderarlas con estos nuevos tractores cognitivos. El partido está en marcha, la discusión apenas comienza, y la urgencia es clara: hay que subirse al tren de la IA Generativa y tomar acciones concretas hoy mismo.

Mira aquí el estudio: