Sr. presidente Boric:

Ayer vimos por televisión su enésimo anuncio contra la delincuencia en la Región Metropolitana y, lejos de aplaudir su puesta en escena, los chilenos que vivimos en regiones miramos con desesperanza cómo su gobierno centralizado nos ha abandonado.

Aunque solo se trate de un saludo a la bandera, cargado de tintes políticos, es una señal de la irrelevancia que tenemos en su agenda. Le cuento que de norte a sur hay delincuencia; de Arica a Magallanes tenemos balaceras, barrios tomados por el narcotráfico y crimen organizado y, ¿sabe una cosa? Nuestros vecinos también tienen miedo.

Está de más decir que los delincuentes se trasladan y que los controles en la carretera no los van a detener. Otra vez anuncios rimbombantes, con un evidente exceso de protagonismo a las figuras políticas oficialistas, con promesas que a nosotros nos lleva a preguntarnos, ¿y para las regiones qué?