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Camión con retroexcavadora derriba cinco postes de alumbrado en San Miguel. Incidente corta suministro eléctrico y afecta a telecomunicaciones e internet en 30 viviendas. Vecinos denuncian acumulación de cables obsoletos en postes, lo que facilitó el enganche de la máquina. Garrido reporta problemas recurrentes de choques y cortes eléctricos. Residentes critican falta de compensación y lentitud en reparaciones.
Un camión que cargaba una retroexcavadora derribó cinco postes de alumbrado público en la comuna de San Miguel, específicamente en las calles San Ignacio con Florencia. El incidente ocurrió cuando la máquina enganchó los cables del tendido eléctrico, lo que provocó el colapso de la infraestructura.
Personal de ENEL trabaja en la reposición del servicio, aunque se anticipan “largas horas” de reparación.
Alejandro Garrido, vecino del sector, señaló a Radio Bío Bío que “no es primera vez que ocurre. Hace dos meses estamos con problemas de choques de postes y cables sobrecargados. Las empresas no retiran los cables antiguos, y ahora esto pasó”. La caída afectó a telecomunicaciones, internet y suministro eléctrico de al menos 30 viviendas cercanas.
Infraestructura sobrecargada y riesgos recurrentes
El accidente expuso un problema crónico, la acumulación de cables obsoletos en los postes. Garrido explicó que “entre poste y poste hay más cables cada día. Los antiguos se queman, instalan nuevos encima, y el peso aumenta”. Esta situación habría reducido la altura de los cables, facilitando que la retroexcavadora los enganchara.
Hace tres meses, un choque vehicular ya había derribado un poste en el mismo sector. Residentes denuncian que los cortes eléctricos ocurren “una vez al mes en promedio”, pero esta semana se registraron dos interrupciones. “Los costos de los servicios son altísimos y no hay compensación”, agregó Garrido.
Vecinos relatan impacto y critican lentitud en reparaciones
Una vecina, que prefirió no identificarse, describió el momento del derrumbe. “Escuché un ruido fuerte y vi caer el poste. Afortunadamente, no había niños ni autos estacionados. Fue casi milagroso que no hubiera una tragedia”, expuso.
Aunque seguridad municipal y Carabineros custodian la zona, los vecinos exigen una fiscalización más estricta. “Las constructoras pasan con camiones altos, y los cables están demasiado bajos. Esto ya es sistemático”, concluyó la afectada.