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Pyme de Curacaví denuncia pérdidas por accidente en obras de renovación de matriz de agua potable de Aguas Andinas, ejecutadas por la empresa Montecorvo, dejando al local de comida Big Toro sin ventas desde septiembre. A pesar de acuerdos con otros afectados, Big Toro reclama $15 millones en indemnización por daños y pérdidas, acusando falta de respuesta de Montecorvo y riesgo de perder patente comercial. Dirección de Obras Municipales autoriza reparaciones, pero pyme afirma que aún no se han iniciado. Montecorvo argumenta que problema proviene del trazado del ITO de Aguas Andinas y propone transacción con indemnización, logrando acuerdos con algunos afectados, pero no con Big Toro.

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Una pyme de Curacaví denuncia que lleva meses sin vender debido a los daños sufridos tras el derrumbe de su inmueble ocasionado por un accidente en las obras de renovación de la matriz de agua potable de Aguas Andinas, ejecutadas por la empresa contratista Montecorvo. Esta última asegura que ya alcanzó acuerdos con otros afectados, pero la pyme denunciante es la única con la que las conversaciones no han prosperado.

El negocio afectado, Big Toro, es un local de comida ubicado en la avenida Ambrosio O’Higgins, cerca del municipio de Curacaví. Según el emprendimiento, el accidente que desencadenó los problemas ocurrió el 6 de septiembre alrededor de las 14:00 horas.

Las pérdidas del local Big Toro en Curacaví

Desde Big Toro informaron a BBCL que los locales con fachadas de adobe resultaron dañados por el derrumbe, atribuido a trabajos realizados por Montecorvo LTDA, subcontratada por Aguas Andinas. Los afectados sostienen que existe una responsabilidad compartida.

Aguas Andinas confirmó, mediante un requerimiento enviado a Big Toro, que las obras comenzaron el 5 de agosto como parte del “plan de renovación de matriz de agua potable” en cumplimiento de compromisos con la Superintendencia de Servicios Sanitarios.

En el documento, la empresa señaló que los daños se están abordando según las responsabilidades legales de su contratista, a través de un “proyecto de reparación de fachadas”, cuya fecha de ingreso estaba prevista para el 17 de octubre.

No obstante, Big Toro asegura no haber recibido indemnización alguna por las pérdidas de mercadería, muebles y aparatos electrónicos, estimadas en más de $6 millones. Además, denuncian pérdidas por otros $6 millones debido a los tres meses sin operar, y solicitan $3 millones adicionales por daño moral, sumando un total de $15 millones como indemnización.

Incluso, hasta la actualidad, desde el emprendimiento declaran que se perdió el contacto con la empresa contratista responsable de los daños.

Nada con Montecorvo. Ellos no reconocen los daños. Nos dijeron ‘demándenos’“, afirman desde Big Toro, negocio que el 6 de enero cumplirá cuatro meses con las puertas cerradas. “Vendiendo cosas tuvimos que salir adelante”, confesaron desde el emprendimiento.

Además, la pyme advierte que corre el riesgo de perder la patente comercial del local debido a la imposibilidad de pagarla.

Tenemos que pagar patente antes del 20 (de diciembre). Tampoco se han hecho responsables de eso y nosotros tenemos patente comercial (de comidas al paso) y patente de alcoholes”, agregaron.

Obras de reparación en local de pyme

Por su parte, la Dirección de Obras Municipales (DOM) de Curacaví confirmó el 4 de diciembre que ya emitió y firmó el Permiso de Edificación Reparación, permitiendo así el inicio de las reparaciones de los locales afectados.

Sin embargo, según señalan desde la pyme, hasta ahora los arreglados no han tomado curso.

No han hecho nada. Está Copergo (otra empresa contratista de Aguas Andinas) arreglando otras filtraciones (de agua) y nadie dice nada (…) Aguas Andinas brilla por su ausencia“, dijeron desde la pyme.

Big Toro cerrado | Cedida por la pyme

La versión de contratista de Aguas Andinas

El abogado Mauricio González, representante de la empresa Montecorvo, afirmó que el origen del problema radica en el trazado del Inspector Técnico de Obra (ITO) de Aguas Andinas y no en la construcción realizada.

Asimismo, González señaló que, en representación de Montecorvo, se acercó a los afectados para proponer una transacción y así evitar un juicio. Según el abogado, los dos propietarios de los locales afectados firmaron un contrato de transacción, en el que se estipulan la reparación de las propiedades dañadas y una indemnización económica.

El abogado aclaró que, aunque las indemnizaciones corresponden legalmente solo a los propietarios, la empresa también buscó acuerdos con los arrendatarios. Con uno de ellos se logró un acuerdo, pero con Big Toro no se llegó a un entendimiento en términos económicos.