A tres días de asumir sus cargos, los alcaldes de Santiago, Mario Desbordes, y Ñuñoa, Sebastián Sichel, denunciaron problemas administrativos de las gestiones anteriores. Ambos mandatarios han iniciado auditorías para esclarecer posibles irregularidades.
De acuerdo a La Segunda, Desbordes detalló que “vamos a hacer revisiones en todas las áreas” y anunció que denunciarán a Contraloría y, eventualmente, al Ministerio Público. Entre los hallazgos en Santiago, destacó la falta de pago de contribuciones de un edificio municipal en leaseback, cuyo remate fue frenado mediante un convenio por cientos de millones de pesos. Asimismo, denunció deudas de IVA, cotizaciones previsionales impagas y la inminente caducidad de contratos de vehículos de seguridad.
En el área de salud, advirtió la falta de stock de anticonceptivos en establecimientos municipales, calificándolo como “grave”. Respecto a la Dirección de Educación, cuestionó la sobredotación de personal bajo la gestión de Rodrigo Roco.
“Los establecimientos educacionales aumentaron sus dotaciones de manera completamente injustificada, incrementando los costos. Y al mismo tiempo se redujeron de manera drástica los ingresos por subvenciones, porque la matrícula bajó a los peores niveles históricos”, señaló.
En ese sentido, estimó un déficit de $16 mil millones en el municipio de Santiago.
Por su parte, Sichel calificó la situación en Ñuñoa como un “tremendo desorden administrativo”. Expuso que las corporaciones municipales habrían triplicado sus gastos en personal, con una “alta carga de
contrataciones políticas sin experiencia municipal”.
En cuanto a la Corporación Cultural, mencionó que las cotizaciones están
impagas, por lo que no podría desvincular a quienes están en cargos
duplicados.
Mientras que también acusó que todos los edificios de la mencionada corporación se quedarán sin Internet. Pues, denunció que este mes por no pago en los últimos 7 meses (desde mayo está impago).
Sobre lo presupuestario, explicó que existe un desorden en términos de su planteamiento, control y ejecución. Y que en materia de ingresos, el ítem correspondiente a la morosidad de años anteriores proyectó para este 2024 un total que duplica el histórico, pasando de los aproximadamente 8 mil millones a 16 mil millones.
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