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El diputado Jorge Alessandri y el candidato a alcalde por Ñuñoa, Sebastián Sichel, junto a concejales de Chile Vamos, presentaron una denuncia ante la Contraloría contra de la gestión de la alcaldesa Emilia Ríos. La acusación se centra en una licitación para la recolección de basura que aparentemente no tuvo efecto, resultando en la contratación directa de una empresa demandada por más de $1.100 millones por incumplimiento de contrato. Por su parte, la municipalidad de Ñuñoa explicó que el trato directo se decidió al declararse desierto el proceso de licitación original, asegurando que se evaluaron diversos factores antes de tomar esta decisión. Además, confirmaron que la empresa Demarco S.A. tiene multas impagas por un monto de mil millones desde 2018, atribuyendo los retrasos a problemas con la obtención de permisos necesarios.

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El diputado Jorge Alessandri y el candidato a alcalde por Ñuñoa, Sebastián Sichel, junto a concejales de Chile Vamos de la comuna, llegaron a la Contraloría para presentar una denuncia por el “Caso de la Basura”.

La acción judicial es contra la administración de la actual alcaldesa Emilia Ríos. En específico, por una licitación que se habría realizado para la recolección de basura, pero que no habría tenido efecto.

Y finalmente se habría contratado, a través de trato directo, a la actual empresa que presta servicios al municipio.

Esta última está demandada por $1.100 millones por incumplimiento de contrato, lo que fue confirmado a través de un comunicado del municipio.

Los concejales apuntaron a que hay un acuerdo por parte de la municipalidad para recontratar a dicha empresa. Mientras que Sichel dijo que llama la atención que la misma que fue demandada por el municipio, sea la que finalmente se adjudica esta administración.

¿Qué dice el municipio?

La municipalidad cuestionada explicó en el escrito, que en un principio se realizó un proceso de licitación que se decretó como desierto.

“Ante este escenario y para no dejar a la comunidad sin estos servicios esenciales mientras se desarrolla el segundo llamado a licitación, se evaluó recurrir a un trato directo, por el plazo de un año, mientras el segundo llamado a licitación avanza y cuyas bases ya fueron enviadas a Contraloría para Toma de Razón”, argumentaron.

Respecto a la multa impaga, indicaron que “Demarco S.A. debía, por contrato, construir diversos puntos soterrados para contenedores de basura. Estos no se pudieron ejecutar en el plazo establecido originalmente en las bases de licitación, debido a demoras en la entrega de los permisos necesarios por parte de Serviu Metropolitano”.

Finalmente, aclararon que “contar con multas impagas no es una inhabilidad para celebrar contratos con el municipio”.