Frente a las amenazas que han recibido funcionarios de Gendarmería, por la instalación de inhibidores de señales de celular en el penal Santiago 1, en el mundo político aseguran que el Estado no puede ceder ante el fortalecimiento del crimen organizado al interior de recintos penitenciarios.

Luego que el Ejecutivo confirmara la instalación de dichos aparatos, gendarmes acusaron amenazas por parte de reos organizados.

Contratación de sicarios y motines son parte de los amedrentamientos que acusan los funcionarios. El ministro de Justicia, Luis Cordero, sostuvo que Gendarmería se encuentra tomando los resguardos necesarios para no poner en riesgo la seguridad de ellos.

Al ser consultado por La Radio, el exdirector de Gendarmería, Claudio Martínez, señaló de manera tajante que ante este tipo de presiones la institución no debe ceder.

Instalación de inhibidores en Santiago 1

El senador independiente y presidente de la Comisión de Defensa Nacional, Kenneth Pugh, indicó que el crimen organizado ha ido ganando terreno rápidamente dentro de los recintos penitenciarios. Por ello, al no cumplirse las condenas que incluyen la incomunicación con el exterior, se estaría instalando la impunidad.

Por otra parte, el senador del PPD, Pedro Araya, dijo que debido a la gran cantidad de operaciones criminales que se organizan dentro de las cárceles, la instalación de estos aparatos es una buena medida. Además, puso énfasis a la necesidad de construir nuevos recintos penitenciarios.

Recordemos que en el Ministerio de Justicia aseguraron que existe una “plena coordinación” tanto con la PDI, Carabineros y el Ministerio Público.

Respecto al inicio del funcionamiento de los aparatos, por razones de seguridad, no se puede revelar el día exacto de la puesta en marcha de su funcionamiento.