Un funcionario del municipio de Las Condes, quien habría sido una de las últimas personas en ver al tesorero municipal, Juan Andrés Peña Peña, con vida, pidió respeto frente a lo sucedido. Además, apuntó a que "lo ponían como un delincuente" y que ello le habría afectado.

La mañana de este lunes, un funcionario de la Municipalidad de Las Condes, Gerardo Guzmán, se refirió a lo acontecido la madrugada de este domingo, cuando se encontró muerto al tesorero municipal, Juan Andrés Peña Peña. Este habría sido de las últimas personas que lo vio con vida en el edificio edilicio, donde fue el hallazgo.

En conversación con CHV, Guzmán afirmó que ambos trabajaron juntos directamente, asegurando a que el tesorero “era una persona honesta y decente”.

Asimismo, indicó que “a mí me molesta es que, ayer, en un programa de televisión, dudaba la periodista de que nosotros estuviéramos trabajando el día sábado hasta las 21.00 horas”. Asegurando que “personalmente me retire a las 21 horas y el señor Peña siguió acá porque se quedaba casi todos los sábados hasta las 9 y media”.

Y en esa misma línea, pidió “respeto por los funcionarios, porque estamos destruidos, y especialmente la familia. El señor era una persona honesta, decente”.

“Yo hablé con él hasta las 7 de la tarde, a las 7 de la tarde se retiró a su oficina, que queda como a 5 metros de distancia una de otra, y de ahí no vimos nunca más a él”, relató.

Y agregó que “no hubo ningún tipo de sospecha, lo que sí tuvo que haber sido un impacto al corazón de una, porque no escuchamos un quejido, ni un grito, ni nada”.

Sobre la investigación que se encuentra en curso y en la que justamente estaba siendo investigado el fallecido funcionario, respecto a un presunto fraude de horas extras, este indicó que “cada uno es responsable”.

“Si a mí me asignan unas horas extras y soy capaz de hacerlas, las hago. Hay una firma aquí, que se firmaba en un libro, pareció muy extraño para muchos que se firmara en un libro, pero todos los municipios hacen lo mismo. La Contraloría siempre vino aquí a investigar y nunca dijo que estaba mal”, señaló.

Frente a ser consultado sobre como estaba sobrellevando Peña dicha investigación, acusó que “lo persiguieron hasta los estacionamientos, no podía tener una vida privada, eso le afectó”.

“El estrés le produjo eso, su entorno familiar, sus hijas, su señora, los vecinos, se enteraron, y a cada rato lo ponían como que era un delincuente. Eso yo creo que fue lo que más le afectó”, apuntó.