Un niño de 1 año y 7 meses sufrió un ataque de un perro, cuando estaba en un pasillo del edificio en que vive en Ñuñoa.
Según informó T13, el hecho se produjo el pasado sábado, cuando el pequeño y su familia regresaban de realizar compras en el supermercado.
En el pasillo, se encontraron con una persona que paseaba un perro pastor australiano, el cual se soltó de la correa y se abalanzó sobre el niño.
El ataque dejó al infante con heridas graves en su rostro, específicamente en un ojo, mejillas, nariz y parte de su mentón. Toda esta situación fue denunciada a Carabineros.
Gerardo Ureta, tío del pequeño, relató al citado medio que hubo que trasladarlo a un centro asistencial donde debió ser operado del ojo.
Agregó que el can que realizó el ataque no era paseado por sus dueños, sino por un cuidador, ya que los propietarios están fuera del país.
“No tan solo tiene que haber responsabilidad de quién es el dueño del animal, cuál sea, sino que también de quién en ese minuto tiene el animal. Hoy día nos preocupamos bastante de quiénes son los propietarios, pero también debiera haber un tipo de registro o certificación de quiénes son calificados o aptos para el paseo de perro”, indicó.