La región Metropolitana acumula 13 asesinatos durante los últimos siete días, luego de los últimos cinco crímenes ocurridos anoche en Cerrillos y San Bernardo.
El primero de ellos ocurrió la noche del sábado en Maipú, cuando una niña de 10 años murió baleada mientras transitaba junto a su padre en un vehículo.
En este caso, aún no hay detenidos.
En tanto, durante ese mismo fin de semana hubo otros dos homicidios en Santiago y en San Joaquín. El primero afectó a un chileno de 54 años que estaba en su hogar.
El segundo, en tanto, fue hallado en la vía pública con una herida cortopunzante.
Luego, el lunes se produjo un nuevo asesinato en Maipú. Ese día, un hombre fue llevado en auto hasta calle Machicura, donde fue baleado.
Un video registró el crimen.
Ya el martes se informó un crimen ocurrido en Conchalí, donde un hombre fue apuñalado por dos individuos.
Se indaga si lo ocurrido se trató de una venganza, esto por el robo de un celular que habría cometido la víctima.
Horas más tarde, y nuevamente en Maipú, se encontró un cadáver al interior de un canal.
Ya el miércoles, y también en Maipú, el administrador de un local de sushi fue asesinado a tiros. Además, los homicidas robaron $5 millones para pagar sueldos.
La víctima era un ciudadano colombiano.
Ayer, se informó el asesinato de un hombre en Huechuraba, quien fue ultimado a tiros al interior de un vehículo.
Según Fiscalía, su madre entregó datos de quiénes podrían estar detrás del crimen.
Los últimos crímenes ocurrieron anoche. A eso de las 21:00, un hombre fue baleado en San Bernardo, cuando salía de la casa de un familiar.
Se trata de un oriundo de la región de O’Higgins, quien recibió un disparo en el tórax luego de resistirse a la sustracción de un banano.
En La Pintana, un hombre murió tras ser apuñalado por otro sujeto, esto mientras bebía alcohol en calle Paicaví.
La familia dice que conoce al autor del crimen.
Finalmente, tres personas fueron asesinadas a tiros en Cerrillos, esto en un ruco ubicado bajo un puente que cruza el zanjón de la Aguada.
Las víctimas son dos hombres y una mujer, todos chilenos, los que recibieron múltiples disparos.
Hasta ahora, las investigaciones por estos casos no dejan detenidos.