Cinco hechos fueron los que se presentaron en la primera parte de la formalización de la exalcaldesa Cathy Barriga, entre ellos, la compra de collares Swarovski, útiles escolares, mochilas y peluches de Renacín y Smapina.
La fiscal, Lorena Parra, indicó que “en al menos cuatro ocasiones, la imputada Barriga Guerra, en su calidad de máxima autoridad comunal, instruyó la compra, vía trato directo, de un total de al menos mil collares de cristal”. Lo que tuvo un valor de $17.850.000.
Agregando que “dichas compras se destinaron a fines no institucionales, como lo eran las compras de especies, regalos y obsequios, así como atenciones realizadas con motivos de cumpleaños, fiestas de navidad, donaciones y festividades varias u otros”.
“Finalmente, no existe registro alguno de las personas a quienes se entregaron los mil collares de cristal”, indicó.
Por otro lado, también se describió un presunto fraude al Fisco en la Corporación Municipal de Educación de Maipú, el cual administra 26 establecimientos educacionales y 26 salas cunas.
La exalcaldesa “instruyó a trabajadores de la Codeduc, la compra de útiles escolares y otros materiales con cargos a fondos públicos de la Codeduc, destinados expresamente a apoyo de la educación pública, para ser entregados a estudiantes de establecimientos educacionales particulares”.
Así también, habría hecho el mismo procedimiento con compra de mochilas con logos corporativos de su gestión municipal. Se trataría de 22 mil mochilas por un valor total de $91.400.000 aproximadamente. Ello, además de 5.000 “regalos publicitarios”, por un valor de $32.219.250.
Según continuó la persecutora, estas compras se habrían realizado con facturas falsas, y con cargo a los recursos públicos destinados a la educación municipal.
Y el tercer fraude al Fisco, mediante la Codeduc, sería la compra de peluches. “Instruyó la compra, a cargo de fondos públicos destinados al apoyo de la educación pública, de un total de 30 mil peluches asociados a la imagen corporativa de la gestión municipal de la imputada Barriga Guerra”.
Peluches que ella misma denominó como Renacín y Smapina, un sol y una gota. Y que tuvieron un valor total de $54.978.000. 10 mil peluches, que costaron $18.326.000 y otros 20 mil, por $36.652.000.