Este viernes, Felipe Muñoz, el alcalde de Estación Central, se reunió con dirigentes y vecinos de la comuna para informar del envío de un oficio a la Seremi de Vivienda Metropolitana, en el cual se solicita que esta tome una decisión sobre los edificios que se mantienen sin entrega de recepción final en la comuna.

Al respecto, Muñoz reiteró la postura del municipio: “Nuestra obligación es cumplir y hacer cumplir la ley. Por lo tanto, es una decisión inconmovible no entregar aquellos permisos, porque además es un asunto de mínima ética y consistencia”.

Sin embargo, el jefe comunal explicó que, tanto las inmobiliarias, como algunas autoridades, han insistido en la obligatoriedad de esos otorgamientos. “Ante esta situación es que solicitamos a la SEREMI que se haga cargo del tema y lo resuelva. La voluntad decidida y confirmada de esta administración municipal es mantenerse apegada a la ley y sostener su lealtad con los principios que la guían”, dijo.

Como es sabido, Estación Central ha sufrido bastante destrucción en su calidad de vida, sobre todo por la proliferación de mega construcciones, que fueron autorizadas fura de toda legalidad por las administraciones anteriores, respondiendo a un afán desmedido y descontrolado de lucro, y sin considerar las consecuencias provocadas a los vecinos.

La población de Estación Central prácticamente se ha duplicado en menos de una década, sin que haya existido un mínimo de planificación urbana ni crecimiento en infraestructura. La situación de la seguridad ha sido llevada a un límite prácticamente insolente.

Desde que la actual administración llegó para asumir el municipio, se ha intentado, por todos los medios disponibles, hacer frente a este problema, poniendo al centro la dignidad de los vecinos.

Se han iniciado sumarios y presentado querellas, en contra de los posibles responsables del desastre urbano, y los esfuerzos se han concentrado en avanzar en el desarrollo del Plano Regulador Comunal, que se encuentra en sus fases finales.

De todo este proceso, quedó un grupo de edificios construidos que todavía no pueden ser entregados, ya que no cumplen la normativa urbana ni respetan el proyecto inicialmente aprobado por la DOM de la gestión anterior.

Insistentemente, y con todo tipo de presiones, las inmobiliarias comprometidas han solicitado que se otorguen las recepciones finales. En algunos, por obligación de la ley y tras oficios de la División de Desarrollo Urbano del Minvu que así lo ordena, han debido ser otorgados. Ahora, quedan 4 edificaciones, que son abiertamente ilegales y respecto de las cuales la Municipalidad ha persistido en negar ese permiso, por no ajustarse a la normativa vigente.

“El tema ya no está en nuestras manos. Es tiempo que las autoridades, en este caso Seremi de Vivienda, se hagan cargo de su resolución”, dijo el alcalde Felipe Muñoz.