Esta jornada de sábado, el Monseñor Fernando Chomalí Garib asumió como nuevo Arzobispo de Santiago, en la región Metropolitana. Durante su primera homilía, hizo una aclaración respecto a sus funciones.

Según dijo, no tendrá un rol político y llamó a que no le pregunten por leyes o decisiones administrativas, pero sí se permitió hacer una crítica a la sociedad y a derechos sociales que deben garantizar la calidad de vida de los chilenos.

Previo al plebiscito constitucional, Chomalí dijo que él no podía y no tenía el derecho de hacer un llamado a que votar respecto a la propuesta. Aún así, señaló que deben preguntarse cuál es el mejor camino para el país.

Monseñor Fernando Chomalí: “La iglesia no se mete en política, no es lo suyo”

En la instancia, el Monseñor también comentó que desde que fue nombrado por el Vaticano como Arzobispo de Santiago, algunas figuras vieron el nombramiento con tinte político. Lo anterior, fue descartado y dejó en claro que la iglesia no se involucra en política.

Dentro de lo que señaló como el mejor camino para Chile, hizo alusión a cambios sociales como la reforma de pensiones y comentó que hay muchos adultos mayores abandonados en hogares o viviendo de sueldos que no alcanzan.

Igualmente, el sacerdote también se refirió al derecho a la vida, a la libertad religiosa y a la educación de los niños. Además, agradeció a la comunidad católica en Concepción y recordó su despedida el pasado 9 de noviembre.

Con respecto a la Arquidiócesis de Concepción, se espera que se designe un administrador apostólico o un administrador diocesano, ya que, por ahora, se encuentra con sede vacante.