La Contraloría General de la República detectó una serie de falencias en el proceso de subvenciones y aportes por asignación directa de la Municipalidad de Las Condes a diversas organizaciones.

En el informe del ente fiscalizador, se advierte que existe una “debilidad de control” de parte del municipio respecto a recursos públicos, según consignó La Tercera.

Y es que dicho municipio administrado por Daniela Peñaloza (UDI), formó parte del listado de aquellos que transfirieron más recursos en subvenciones y aportes. Esto, según una revisión realizada por la institución en 2022, a la cual accedió el medio citado.

“La finalidad de la revisión fue comprobar si las transacciones cumplen con las disposiciones legales y reglamentarias, se encuentran debidamente documentadas, verificando, además, el cumplimiento de los objetivos para los cuales fueron transferidos los recursos y su correspondiente rendición”, justificó el texto.

Nuevo flanco para Las Condes

Por lo que se abrió un nuevo flanco para la administración de Peñaloza, luego de que hace un mes se detectaran faltas a la probidad en la compra de terrenos para la construcción de un Cesfam en la comuna y que hoy está siendo investigado.

El mencionado informe analizó las transferencias efectuadas por la Municipalidad de Las Condes hacia diferentes organizaciones. Detectando que durante el 2021, dicho municipio transfirió $1.006.059.827 en total, de los cuales $10 millones fueron para la ACHM, $700 millones para AMSZO, $160 millones para AMZO y $135 millones para la Amuch.

Recursos que fueron transferidos como aportes o cuotas de dichas organizaciones. Sin embargo, la Contraloría detectó que dichos recursos nunca se rindieron y tampoco la municipalidad exigió claridad con el destino de los mismos. A esto se le suman $55 millones transferidos por Las Condes para la administración del Parque Hurtado, que no fueron acreditados.

Además, autorizó más de $846 millones a las organizaciones municipales del sector oriente, los cuales están sin “establecer su destino”. Dichas falencias, según el ente contralor, “obedece a una debilidad de control” de parte de la administración de la alcaldesa UDI.

El mismo análisis arrojó que a través de un convenio, el municipio transfirió $103.256.172 a la Fundación Integra para el mejoramiento de jardines infantiles de la comuna.

Y halló que contaba con una debilidad en la revisión de rendiciones, falta de seguimiento a los convenios realizados y la inexistencia de un procedimiento de prevención de fraudes.

Lo que justificaron con la contratación del estudio jurídico Albagli Zaliasnik, para elaborar un reglamento. Sin embargo, Contraloría reprochó este acto, asegurando que “no procede contratar” debido a que la norma que iban a elaborar no se ajusta a lo que sirve para las municipalidades.

Falta de rendición de cuentas

Por otro lado, también encontraron falta de rendición de cuentas en organizaciones municipales de la comuna. Y frente a ello, la dirección de Control de Las Condes argumentó que no les correspondería fiscalizar a dichas entidades.

También el ente contralor cuestionó que hay funcionario que cuentan con “duplicidad de funciones”. Ya que algunos trabajadores contratados por la Asociación de Municipalidades para la Seguridad Ciudadana en la Zona Oriente, ejercían labores en la Municipalidad de Las Condes.

Consultados al respecto por el medio citado, la Municipalidad de Las Condes señaló que “respecto a la rendición de las transferencias a instituciones privadas, la interpretación histórica de las Unidades Técnicas de Control del municipio sostenía que aquellos recursos no debían ser fiscalizados al ser transferidos a “instituciones de naturaleza privada”.

Agregando que el municipio “instruyó a todas sus Unidades Técnicas de Control a dar estricto cumplimiento a lo indicado por Contraloría y, de manera proactiva, no se transferirán nuevos recursos a las entidades incluidas en el informe hasta que no sean subsanadas todas las observaciones”.