Una mujer de 30 años, identificada como Loreto Salazar, murió atropellada en medio de un procedimiento policial en San Ramón. Testigos denunciaron que efectivos de la PDI no prestaron ayuda de forma inmediata a la víctima.

Según los primeros antecedentes, la Brigada de Investigación Policial de la policía civil intentó concretar en La Cisterna la detención de un hombre por la venta de droga.

Este último, al notar la presencia policial, huyó en su automóvil y arrolló a un detective que resultó con lesiones leves. En tanto, otros funcionarios dispararon en 3 oportunidades en contra del sujeto, sin lograr herirlo.

Tras ello, se generó una persecución que llegó a la intersección de las calles Santa Ana con Alvear, donde una madre y su hijo cruzaron en un paso peatonal habilitado.

Por allí pasó el perseguido a alta velocidad, quien atropelló a la mujer que murió minutos más tarde en el Hospital Padre Hurtado. Así lo confirmó comandante Juan Reyes, de la prefectura Santiago Sur de Carabineros.

En medio del operativo, y en la comuna de La Granja, fue encontrado abandonado el automóvil del sospechoso, pero sin ocupantes.

En el domicilio del ahora prófugo, se realizó una entrada y registro donde se incautó marihuana y cocaína dosificada, a granel, un arma y municiones.

Denuncian a la PDI

Con respecto a la muerte de la afectada y que nada tenía que ver en el operativo, a través de una declaración grabada sin la posibilidad de preguntar mayores antecedentes, fue el subprefecto jefe de la Bicrim La Cisterna, Juan González, quien señaló que los detectives cesaron la persecución para ayudar a la mujer.

Sin embargo, esto fue negado por testigos del lugar, quienes además lamentaron lo ocurrido.

Mientras que la venta de drogas sigue siendo investigado por la PDI, lo ocurrido con la mujer es indagado por la SIAT de Carabineros.

Madre de dos niños

Loreto Salazar, de 30 años, tenía un hijo de 12 años y una niña de 5, según relató su mamá, Sandra Salazar.

En conversación con Radio Bío Bío, contó que el pasado lunes su hija fue a buscar a la pequeña al colegio y la dejó en casa, para después llevar a su primogénito al nutricionista.

“Fue a buscar al niño al colegio porque le tocaba nutricionista. A la vuelta, pasó la tragedia”, relató.

En tanto, su hermana Karen dijo que “lo único es que hay un culpable y ese culpable tiene que aparecer y pagar”.

Finalmente, resaltó que el hecho pudo ser una tragedia aún mayor, ya que el hijo también pudo haber sido atropellado.

“Él podría haber estado al lado de ella, podría haber sido una tragedia mayor”, expresó.