En libertad vigilada quedó la carabinera que golpeó y provocó un aborto a una mujer que fue detenida en 2016, en una comisaría de la comuna de Santiago.
El Cuarto Tribunal de Juicio Oral en lo Penal de Santiago condenó a la carabinera Tiare Noemi Vergara Torres a la pena de cinco años de presidio, con el beneficio de la libertad vigilada intensiva por igual lapso, en calidad de autora del delito consumado de apremios ilegítimos, causando lesiones graves.
Este ilícito fue perpetrado en mayo de 2016, en la comuna de Santiago.
En fallo unánime, el tribunal dio por acreditado, más allá de toda duda razonable que, “aproximadamente a las 11:00 horas del 26 de mayo de 2016, (…) mientras se realizaba una marcha estudiantil no autorizada en el centro de Santiago, la víctima (…) fue detenida por funcionarios de Fuerzas Especiales de Carabineros de Chile, entre los cuales se encontraba la imputada, cabo 2° de Carabineros, por haber tratado de interferir en la detención de un grupo de estudiantes (…)”.
En libertad queda carabinera que golpeó y provocó aborto a mujer
“Una vez detenida –consigna la resolución- fue trasladada a la 3° Comisaría de Santiago, alrededor de las 11:45 horas, lugar en donde trataron de esposarla, situación que generó angustia en la víctima, quién señaló sufrir de crisis de pánico, tratando de resistirse e insistiéndoles a los funcionarios policiales que le pusieran las esposas por delante. Acercándose al lugar más Carabineros, quienes procedieron a sostenerla de los brazos y piernas. En ese momento la imputada (…) procedió a propinarle una patada en la vagina”.
Posteriormente, según dieron por establecido los sentenciadores, “(…) la víctima fue conducida al SAPU de Renca a constatar lesiones, comenzando en el trayecto a sentir cólicos y malestar estomacal, siendo revisada por el médico del SAPU, quién constató que presentaba sangrado vaginal, siendo derivada al Hospital San Juan de Dios, lugar en el que le realizaron una ecografía transvaginal y un examen de sangre destinado a determinar la hormona del embarazo, que resultó positivo, encontrándose en proceso de aborto”.
Debido a la agresión sufrida, “la víctima presentó lesiones por la acción de un objeto contundente (…) de pronóstico médico legal grave, que sanaron, previo tratamiento quirúrgico especializado, en 32 a 35 días con igual tiempo de incapacidad, sin dejar secuelas funcionales ni deformación estética, que implicaron la interrupción de un embarazo inicial, que no era evidente a la víctima ni de conocimiento de la imputada”.
Inhabilitación temporal
El tribunal, aplicó además, a Vergara Torres, 7 años y 1 día de inhabilitación absoluta temporal en su grado máximo para cargo y oficio público, derechos políticos y profesiones titulares; y las accesorias de inhabilitación absoluta perpetua para derechos políticos y la inhabilitación absoluta para cargos y oficios públicos mientras dure la condena.
Por cumplirse en la especie los requisitos legales, el tribunal sustituyó “el cumplimiento de la pena principal, por la de libertad vigilada intensiva, por el lapso de cinco años, debiendo presentarse al Centro de Reinserción Social de Gendarmería de Chile, que corresponde a su domicilio, dentro del plazo de cinco días contados desde que se encuentre ejecutoriada esta sentencia. Y cumplir durante el periodo de control, con el plan de intervención individual que se apruebe en su momento, como también con las condiciones establecidas en el artículo 17 de la citada ley”.
Apremios ilegítimos
La resolución agrega que: “El quantum de la pena se determinará teniendo en consideración la mayor extensión del mal causado, de acuerdo a lo dispuesto en el artículo 69 del Código Penal, que, en la especie, se tradujo en las consecuencias psicológicas que la agresión reportó en la víctima, a lo que se adicionaron todos los malos tratamientos anexos que debió soportar”.
Por último, los sentenciadores acogieron la demanda civil presentada por la parte querellante, sólo en cuanto se condenó a Vergara Torres a pagar la suma de $5.000.000, por concepto de daño moral causado a la víctima, con ocasión de los apremios ilegítimos de los que fue objeto.