El 8 de agosto de 2022 desapareció Valentina Mardones, tras salir de su casa en Santiago, supuestamente para dirigirse a Isla Negra, en la región de Valparaíso.
Producto de la desaparición de Valentina, y frente a una serie de amenazas que han llegado a celulares de la familia, decidieron presentar una querella por el delito de secuestro.
Dichos mensajes le llegaron a los padres de Valentina el día 24 de enero, cinco meses después de la desaparición de la joven universitaria de 24 años.
Supuestamente, según consignan los mensajes, el motivo sería los comentarios que hacen en los medios de comunicación.
Sujeto: Alo. Estay hay. Responda. (transcripción textual).
Madre de Valentina: Hola, quién es?
Sujeto: Tenemos a tu hija.
Madre de Valentina: Pero quién es ud?
Sujeto: Pero si sigue dando comentario por medio de comunicación a tu hija sufrirá.
Madre de Valentina: Ese trabajo lo tiene que hacer investigaciones.
Sujeto: O la mataré.
Los intercambios de mensajes continúan. De hecho, el sujeto le asegura que es la persona que encontró los documentos de Valentina en la región de Valparaíso.
Esta persona enfatiza en que la joven está con él y le recalca a los padres que si siguen hablando con los medios de comunicación, algo malo le podría pasar a la joven.
Luis Mardones, padre de Valentina, señaló que en un primer momento presentaron una denuncia por presunta desgracia, pero que tras su última aparición en canales de televisión, comenzaron a recibir las amenazas.
Carabineros ya está en conocimiento de dichos actos. También agregó que no descarta que alguien se quiera aprovechar, sin embargo, le parece curioso que no le piden dinero, sólo son amenazas.
Luis agregó que mientras no encuentren un cuerpo, para ellos la joven sigue viva.
Los detalles de la desaparición de Valentina Mardones
La querella que presentó la familia detalla cómo fue la desaparición de la joven, quien estudia Arquitectura en la Universidad de Chile.
A eso de las 10:30 hora del 8 de agosto de 2022, la joven salió de su casa en la comuna de Santiago, portando una mochila. No avisó previamente y sólo dejó una nota que consignaba que se iría a la playa.
Dicha actitud le pareció sospechosa a la familia, ya que no era normal que ella saliera sin avisar, además, dejó su celular en su habitación.
La familia decidió presentar una denuncia ante la Fiscalía Regional Metropolitana Centro Norte. Luis Mardones, padre de la joven, entregó el notebook de Valentina y libretas de notas, sin que se alertara algo sobre su desaparición.
Según los registros de su TNE, se subió a la Estación de Metro Parque O’Higgins, en específico a la línea 2, sin embargo, no se registraron más movimiento.
Luego se confirmó en cámaras de seguridad que tomó un bus Santiago-Quintero, el que debía salir a las 10:50 desde el Terminal de Buses Alameda Tur-Bus. El bus presentó un retraso de 12 minutos.
Un mes después de su desaparición, el padre de Valentina manifestó recibir una llamada telefónica de alguien que dijo ser buzo mariscador. Según esta persona, el 8 de agosto encontró las pertenencias de la joven en el roquerío de Playa El Libro en Quintero.
Este pescador aseguró que dejó las pertenencias en el lugar, para ir a realizar sus trabajos como buzo. Esta persona no se identificó, asegurando que no quería verse involucrado en el caso.
La bolsa café de Valentina tenía su billetera, cédula de identidad, alcohol gel, dinero en efectivo y mondas, además del libro “Mi primera vez en la universidad”, llavero, lentes ópticos, papeles y pasajes de Cóndor bus.
Este pescador, conocido como “El Palomino”, debió entregar una declaración como testigo tras una orden de la Fiscalía. Aseguró que la bolsa estuvo por dos días en la playa, hasta que ya no la vio más. La revisó para ver si podía encontrar algún número de contacto, pero no halló lo que requería.
Cámaras de la Capitanía de Puerto de Quintero, captaron a Valentina caminando sola con un bolso, entre las 12:00 y 15:00 horas del 8 de agosto.
El plan de celular en manos de “El Palomino”
Otro hecho que mantiene en una nebulosa la investigación por este caso, es el plan de celular de Valentina.
La compañía es WOM, y la fecha de contratación el 20 de agosto, es decir, 12 días después de su desaparición, sin embargo, está a nombre de la joven desaparecida.
Desde la compañía señalaron que ese era un número provisorio mientras se activaba el oficial, pero esto nunca ocurrió.
El primer número, según agregó la empresa, está asociado a otra persona: “El Palomino”. Es más, el contrato, que fue mediante una solicitud telefónica, tiene fecha 18 de agosto, 10 días después de la desaparición de Valentina.
El correo asociado al plan, es el del pescador. De hecho, es con ese número con el cual se contactó con los padres de Valentina para informarles que había visto las pertenencias de la joven.