Los investigadores del Instituto de Ciencias Biomédicas de la Facultad de Medicina de la Universidad de Chile detectaron dos nuevos inhibidores de patógenos en el afluente del río Mapocho en la capital.
Tras el hallazgo, un proyecto financiado por Fondecyt permitirá al equipo liderado por el Dr. Víctor García identificar las moléculas antimicrobianas producidas por ambos microorganismos, un trabajo que podría aportar nuevas fórmulas para abordar la crisis de resistencia a los antibióticos en distintas enfermedades.
De acuerdo a la Organización Mundial de la Salud (OMS), se calcula que diez millones de personas morirán anualmente, desde 2050, como consecuencia de la aparición de cepas multirresistentes a los tratamientos farmacológicos convencionales.
Por esta razón, la búsqueda de nuevas bacterias para el desarrollo de antibióticos es probablemente el mayor desafío sanitario del mundo para este siglo.
¿Qué bacterias son?
Las dos bacterias encontradas en el río Mapocho por el equipo de la Universidad de Chile se denominan Pseudomona koreeinsis I1 y Desemzia inserta I2.
Estas se caracterizan por tener una capacidad de inhibición de amplio espectro. La primera de ellas es capaz de producir moléculas antimicrobianas, algunas de ellas de uso comercial; la segunda, en tanto, fue descrita hace más de ochenta años en Alemania, pero solo logró aislarse tres o cuatro veces desde entonces.
El Dr. García asegura que “muy probablemente vamos a salvar el problema de encontrar moléculas ya conocidas. Nuestro proyecto tiene que ver con el descubrimiento y caracterización de esas moléculas”.
Cabe destacar que la resistencia a los antimicrobianos se produce cuando bacterias, virus, hongos y parásitos cambian a lo largo del tiempo y dejan de responder a los medicamentos.