El general director de Carabineros, Ricardo Yáñez, condenó la muerte del cabo David Florido Cisternas, quien fue asesinado de un disparo en la frente en una barbería de Pedro Aguirre Cerda.
Durante la noche de este domingo, Yáñez entregó sus condolencias a la familia, amigos, y compañeros de unidad del cabo segundo.
“Hoy asesinaron a un carabinero, a un chileno, a un padre, a un hijo y a un esposo, y no puede tener costo cero, no puede ser gratis, porque pareciera serlo”, inició sus palabras.
En el transcurso de su mensaje, recordó que hace menos de un mes también agredieron a otros dos funcionarios de la institución en Coquimbo. Al respecto expresó:
“Por eso exijo que hagan su trabajo y entreguen las señales que la sociedad entera necesita porque son importantes, porque pareciera ser que agredir a un carabinero hoy día está normalizado, y eso los delincuentes lo saben”.
Padre de dos hijas
Yáñez detalló que el cabo David Florido era padre de dos hijas: una pequeña de seis meses y otra de 6 años.
“Ojalá esta no sea una noticia más. Ojalá que se tome consciencia que matar a un carabinero es traspasar la defensa que existe entre los delincuentes y la sociedad”, manifestó.
Siendo más crítico, exigió que las penas para quienes agreden a carabineros sean duras y efectivas.
“¿Hasta cuándo? ¿Cuántos carabineros más deben morir? ¿Cuántos carabineros más deben entregar su vida? Merecemos y exigimos el mismo trato, sentido de urgencia, y equidad para lograr detener e identificar a los responsables, porque somos chilenos y personas igual que todos”, cuestinó.
Por último, cerró su mensaje diciendo que han dispuesto sus mejores medios y recursos para lograr identificar y detener a los responsables del crimen.