La Fiscalía Metropolitana Occidente consiguió la prisión preventiva para los líderes de tres clanes del denominado “Cartel del Oro” imputados por el tráfico de 503 kilos del metal desde la región Metropolitana hacia Dubái, en los Emiratos Árabes Unidos.
Según lo consignó el Ministerio Público, la medida cautelar fue dictada para los líderes de los clanes Farías, Herrera y González.
En tanto, los demás formalizados mantendrán cautelares de distintas intensidades. Cabe destacar, que la jornada del miércoles, un total de 29 de los 35 detenidos tras la investigación encabezada por el fiscal jefe de la Fiscalía de Pudahuel, Eduardo Baeza, fueron dejados en libertad.
En tanto, los demás seis fueron formalizados por los delitos de asociación ilícita, contrabando, delitos tributarios y lavado de dinero.
El pasado martes, el fiscal solicitó al 1° Juzgado de Garantía de Santiago una orden de detención contra el grupo de personas, además de la incautación de equipos computacionales y el allanamiento de sus domicilios.
Según los antecedentes de la causa, en los delitos se involucran a la empresa Isidora Metals Limitada, la que se dedicaría a la exportación de barras y monedas de oro desde Chile hacia la compañía Emperesse Billion LLC, ubicada en la ciudad de Dubái en los Emiratos Árabes Unidos.
Sin embargo, la empresa “no ha logrado acreditar la procedencia legal de su oro y las referidas exportaciones presentan inconsistencias”, indica el documento judicial.
Con estos datos, se logró acusar a los diferentes miembros de la denominada organización criminal, la que presentaría un orden jerárquico de al menos tres niveles.
En mayor detalle, dentro de la presunta organización se detectaron “clanes” familiares o de empresas, los que corresponden a: Clan Farías, Proveedores de facturas para Clan Farías, Clan Muñoz, Clan Villanueva, Clan González, Clan Herrera, Casas de Cambio, Proveedores de Facturas para Clan Herrera y Clan Pakistaní.
En tanto, la Fiscalía Metropolitana Occidente indicó que tras la investigación y allanamientos se logró la mayor incautación de oro de la historia, a manos de la Brigada de Lavado de Activos de la PDI.