Miles de personas, en su gran mayoría mujeres, llegaron hasta el Estadio Nacional para participar de la versión senior de la intervención feminista del colectivo Las Tesis.
En su mayoría mujeres sobre 40 años repletaron avenida Grecia vistiendo de negro con pañoletas color rojo para realizar la performance “Un violador en tu camino”, que se viralizó por todo el mundo.
Comenzaron a organizarse para reunirse afuera del principal recinto deportivo del país a principios de semana a través de las redes sociales tras el gran impacto mundial de la performance creada por el colectivo feminista Las Tesis, nacido en Valparaíso.
Algunas en sillas de ruedas, otras en compañía de hijas o nietas, eran dirigidas por algunas mujeres con megáfonos. “A la izquierda, la otra (para evitar decir la derecha)”, las mujeres siguieron ordenadamente la coreografía, mientras otras aplaudían o hacían tocar tambores.
Hasta el lugar llegó incluso Juanita Parra, histórica baterista de Los Jaivas, quien participó de la percusión de la canción.
Previo a la intervención principal, que se realizó a las 20:00 horas, las mujeres que llegaron al lugar practicaron masivamente la intervención, lo que obligó a cortar el tránsito en avenida Grecia.
Tras la intervención, Marcela Betancourt, vocera de las convocantes puso las demandas sobre la mesa. “Queremos participar de manera paritaria en la convención constituyente, queremos que cesen las violaciones a los DDHH, particularmente los de las mujeres”, señaló.
“La transformación debe ser feminista. Si no es feminista, no es una real transformación social”, aseguró, sobre todo porque -en su opinión- esta generación senior ha debido aguantar muchos abusos: “¿Cómo permitimos que pasara esto? Esta nueva generación nos enseña que nunca más solas”, subrayó.
En particular, también afirmó que la convocatoria buscaba convocar e incentivar a las mujeres adultas, pero sin desplazar a las jóvenes que iniciaron el movimiento.
La masiva convocatoria ocupó desde las boleterías de acceso a la galería norte del Estadio Nacional hasta el inicio de Campo de Deportes, incluyendo la calzada norte y sur de avenida Grecia.
Luego de la intervención, muchas de ellas visiblemente emocionadas comenzaron a abrazarse y posteriormente un grupo decidió avanzar por Grecia hacia el oriente.
“Fue algo muy bonito”
“Como experiencia fue algo muy bonito; el compartir entre miles y miles de mujeres, en su inmensa mayoría mayores (…), algunas de 90 años en silla de ruedas”, aseguró Jacqueline Saintard, una economista de 66 años.
Especialmente impactante para ella fue ver cómo en el momento de estar haciendo la performance muchas mujeres “con un tremendo fervor y pasión” gritaron cosas contra sus propios abusadores.
“Frente al abuso y la violación, se escucharon gritos entre medio, fuera de la perfomance, alusivos a experiencias propias y eso es muy impactante”, agregó Jacqueline, que asistió vestida completamente de negro y pañuelo rojo al cuello.
De acuerdo a estimaciones, la manifestación reunió entre 4.000 y 6.000 personas, quienes repitieron la coreagofría al menos cuatro veces y al final, se dispersaron sin causar mayores disturbios.