La jornada de este domingo se desarrolló la audiencia de formalización contra Felipe Padilla Michea, un conductor de Uber acusado de homicidio en contra de un taxista la madrugada del sábado en Santiago tras un confuso incidente.
Tras la audiencia, la Fiscalía logró que se decretara una prisión preventiva por 120 días en contra de Padilla, periodo que durará la investigación del caso, tras ser formalizado por homicidio consumado contra el taxista Paolo Fontt y por homicidio frustrado contra dos colegas de la víctima fatal.
Según indicó el fiscal del caso, Fernando Donoso, el acusado actuó con dolo durante los incidentes de la madrugada del viernes. Además, dijo que minutos antes del confuso incidente Padilla llamó a Carabineros, para pedir autorización para disparar contra los taxistas.
“En rigor, él preguntó a Carabineros si podía disparar, le pregunta dos veces (a los Carabineros). Él no reconoce que tiene un arma, pero evidentemente se puede concluir que lo que estaba buscando, de manera, bastante increíble, era una autorización para poder actuar”, indicó Donoso.
De acuerdo al persecutor, el imputado le dijo al 133 de Carabineros que él inició la persecución contra los taxistas.
“El imputado realizó un llamado (a Carabineros) minutos antes de ocurridos los hechos, recogimos esa información y la transcribimos, dando cuenta que él había visto a los taxis y que él mismo habría iniciado la persecución contra los taxistas (…) premunido de un arma de fuego”.
En la misma línea, el fiscal Donoso dijo que no hay evidencias de que los taxistas hayan disparado contra Padilla, debido a que no se hallaron pruebas en el automóvil del conductor de Uber.
“Se han realizado distintas diligencias, una de ellas el informe pericial que está en desarrollo, pero lo que se desarrolló de manera exhaustiva sobre el automóvil (de Padilla) no da cuenta de que hayan habido disparos contra el imputado”, agregó Donoso.
Sin embargo, la abogada defensora del Padilla, Jannette Jofré, rebatió la postura de la Fiscalía. Según ella, el hecho que el imputado llamara a Carabineros evidencia que su intención no era cometer un crimen, sino que buscaba protegerse ante un eventual peligro.
Jofré aseguró que el hecho de fondo es la persecución que los taxistas estaban haciendo a todos los vehículos que parecían ser Uber, algo de lo cual Padilla fue testigo, según la versión de la defensa.
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Las versiones son contrapuestas, ya que los taxistas aseguran que el imputado inició el conflicto sin ningún motivo, mientras que él aseguró que se inició la persecución posterior al enfrentamiento con los taxistas debido a estaban atacando a distintos vehículos.
Respecto a las supuestas agresiones de taxistas en contra de otros conductores de Uber, el fiscal Donoso señaló que era materia de investigación y que aún no se tienen detalles al respecto.
Tal como adelantó Radio Bío Bío, Uber confirmó a través de un comunicado que Felipe Padilla sí es conductor con una cuenta activa en la aplicación móvil, pero que al momento del incidente, éste no la mantenía encendida, algo que tanto la Fiscalía como la defensa confirmaron durante la formalización.