Autoridades de Til-Til denunciaron que la Comisión de Evaluación Medioambiental de la Región Metropolitana aprobó la instalación de un relleno sanitario en la comuna, el que se ubicaría en el sector de Rungue.
El proyecto acogería residuos industriales peligrosos, que cubriría 43 hectáreas y tendría una capacidad de 3 millones cúbicos de almacenamientos, hecho que molestó a las autoridades locales y han expresado su descontento.
El alcalde de la comuna, Nelson Orellana, aseguró al respecto que es “triste asistir a una reunión de hechos consumados e intereses creados donde la ley del más fuerte e inequidad social se impone sobre la justicia que reclamamos los ciudadanos comunes”.
En un comunicado de prensa entregado por el municipio, se estimó que el impacto medioambiental afectaría la flora y fauna del sector, habría emisión de material particulado, daños a los restos arqueológicos y daño evidente a la población vecina.
Calificando como una “lacra” el proyecto, las autoridades señalaron que existen varios pasivos ambientales en Til-Til que destruyen la comuna, enumerando las dos cárceles, dos rellenos sanitarios, un criadero de cerdos, seis tanques de relaves mineros, entre otros.