Una jornada de terror vivió una pareja de jóvenes, al ser atacados por delincuentes, cuando se bañaban en el río Lontué, en la comuna de Molina, región del Maule.
El hecho se registró a las 17:00 horas del domingo, cuando ambos jóvenes -que además tienen sordera– fueron golpeados y asaltados por dos hombres. Uno de los agresores se quedó para violar a la mujer, de sólo 19 años.
Según sus testimonios, la edad de los atacantes fluctúa entre los 20 y 22 años. Uno de ellos amenazó a la pareja con un palo, con el cual los obligaron a entregar sus pertenencias, como dinero, teléfonos celulares y otros objetos de valor.
No contentos con ello, uno de los asaltantes golpeó a la víctima de sexo masculino con el madero, dejándolo con lesiones y seminconsciente, y luego dándose a la fuga.
Sin embargo, su compañero decidió quedarse para violar a la joven víctima, según confirmó la fiscal Carmen Gloria Manríquez.
Tras salir del impacto, la pareja logró pedir auxilio en una Tenencia de Carabineros, desde donde se dio cuenta del hecho al Ministerio Público.
Las víctimas fueron derivadas al Servicio de Alta Resolutividad (SAR) de Aguas Negras de Curicó, para la constatación de lesiones.
Lengua de señas
Frente a la discapacidad auditiva, la fiscal explicó que al momento de la denuncia, “no había personas que tuvieran conocimiento del lengua de señas en Carabineros“, por lo que inicialmente el caso ingresó como robo con violencia.
Así, fue en el SAR donde la médico tratante se comunicó de forma escrita con la joven agredida sexualmente, con lo que pudo obtener su declaración.
Con estos antecedentes y constatada la violación, la fiscal se entrevistó con la joven mujer para recabar más información, con ayuda de un intérprete de señas, para así formular un retrato hablado de los agresores.
Se instruyó que la Brigada Investigadora de Delitos Sexuales de la PDI de Curicó desarrollara una “Operación Rastrillo” en el sitio del suceso y en la ribera del río, con la finalidad de ubicar huellas, restos biológicos o parte de los elementos robados.
Las características que se lograron recabar de ellos fueron “jóvenes, con aliento etílico, presumiblemente bajo los efectos de alguna droga, malolientes, ropas sucias, personas como que estaban en situación de calle”, dice la declaración.