A través de sus integrantes en el Comité de Manejo de la Sardina y Anchoveta, el sector artesanal desde Valparaíso a Los Lagos se sumó a los reparos manifestados por la industria al proyecto de nueva Ley de Pesca y pide al Gobierno retirarlo de su discusión en la Cámara de Diputados.
El Comité de Manejo de esta pesquería es un órgano consultivo y asesor de la autoridad pesquera, que está integrado por los principales representantes sectoriales de este recurso, entre ellos el mundo artesanal, que de esta manera se suma a los reparos presentados por la pesca industrial al proyecto que se tramita en el parlamento.
Los integrantes del Comité firmaron una carta dirigida al ministro de Economía, Nicolás Grau, en que afirman que esta actividad productiva genera -aproximadamente- 20 mil puestos de trabajo directo y 10 mil indirectos, con la participación de 900 embarcaciones, lo que la convierte en la principal pesquería del país.
En el escrito, afirman que la iniciativa legal no considera nada de lo manifestado por diferentes actores en las reuniones previas con el Subsecretario de Pesca, y que haberlo hecho habría facilitado el trámite de aprobación.
Eduardo Beltrán, uno de los 22 miembros titulares y suplentes del Comité, dice que el proyecto sigue un camino ya conocido, influenciado por agendas políticas, en lugar de ser guiado por una visión técnica y objetiva que beneficie al sector pesquero en su conjunto.
El sector productivo representado en este Comité de Manejo lo componen pescadores, artesanales e industriales, trabajadores de plantas elaboradoras y las actividades conexas, cubriendo un amplio espectro de representación entre las regiones de Valparaíso y Los Lagos.
Victoria Rubio, otra de las representantes del sector artesanal de Bío Bío y Ñuble en esta instancia, indicó que piden al Gobierno retirar el proyecto de su discusión en la Comisión de Pesca de la Cámara, pues su aprobación significaría un duro golpe para la economía de la región.
A su vez, también cuestionó que el presidente de la Comisión no haya accedido hasta este miércoles a darle lectura.
En la carta señalan que es evidente que algunos artículos del proyecto contienen muchas debilidades e imprecisiones, proponiendo particularidades para temas generales, y con materias en que se daña sin miramiento a los pescadores y en otras a la industria, sin ningún argumento para ello.
Afirman que la Subsecretaría de Pesca no ha estado a la altura de la discusión, abriendo una brecha importante entre los actores de primera línea que no permite bajar la conflictividad en el proceso, y que ha faltado la transparencia mínima que este tipo de proyecto requiere.
Esta postura del sector artesanal en el Comité de Manejo cambia el escenario, pues había sido hasta ahora principalmente el mundo industrial el que había planteado reparos al proyecto.
Además, la Conapach, la principal agrupación de pescadores artesanales de Chile, acordó lo mismo en su último cónclave nacional.