Este viernes se desarrolló la audiencia de formalización de cargos de Daniel Eduardo Salinas Carrizo, imputado por el Ministerio Público como autor del delito consumado de homicidio, hecho registrado la semana pasado en Concepción y cuyos detalles impactaron a la región del Bío Bío.
El acusado, ciudadano venezolano, quedó con la cautelar de prisión preventiva, al considerar la magistrada Karina Luna Angulo, del Juzgado de Garantía de Talcahuano, que su libertad es un peligro para la seguridad de la sociedad. En la instancia, además, se fijó en seis meses el plazo de la investigación.
En la audiencia, el Ministerio Público expuso los antecedentes recabados en la investigación y que dan cuenta que el imputado y un trabajador de su taller mecánico se concertaron para matar a la víctima.
Así, el fiscal Mario Elgueta detalló que alrededor de las 17:20 horas del 2 de agosto, la víctima llegó en su vehículo particular hasta calle Tucapel, donde está ubicado el taller mecánico de propiedad del imputado, con quien tenía una relación de amistad. El motivo de la visita fue solicitar que repararan una motocicleta.
En medio de eso y concertado con un trabajador del taller, que hasta ahora no ha sido identificado, el imputado distrajo a la víctima para que el segundo sujeto lo golpeara en reiteradas ocasiones con un fierro en la cabeza.
Dedo cercenado fue usado para ingresar a domicilio de víctima
Producto del brutal ataque, el hombre se desplomó al suelo, momento en que le cercenaron el dedo índice de la mano derecha. Detrás de esa macabra acción estaba usarlo para ingresar al edificio donde vivía la víctima.
De esa forma, ingresaron al domicilio y sustrajeron diversas especies y dinero en efectivo.
A modo de coartada, Salinas Carrizo y su trabajador se trasladaron al domicilio en el móvil de la víctima y así no levantar sospechas.
Tras robar las especies del domicilio, ambos volvieron al taller mecánico, limpiaron el lugar y pusieron el cuerpo sin vida de la víctima en el maletero de su vehículo. Luego, el acusado se traslada al sector de Chome en Hualpén, donde lo dejaron abandonado.
El trabajador que participó del crimen acude al lugar a recoger a su jefe. Esta vez, de acuerdo con la indagatoria, el hombre iba acompañado de una tercera persona y en el auto estaban las especies robadas a la víctima.
Debido a que el crimen ocurrió en Concepción, se solicitó el traslado de los antecedentes desde el Juzgado de Garantía de Talcahuano al de la capital regional del Bío Bío.