El Gobierno, a través del delegado Presidencial (s), Humberto Toro, desestimó las críticas de las diputadas Flor Weisse (UDI) y de Joanna Pérez (Demócratas) por la lentitud de la investigación en el caso del homicidio de tres carabineros ocurrido el pasado 27 de abril en Cañete, región del Bío Bío.

Según dijo la autoridad, aún están vigentes medidas como el toque de queda en Contulmo, Tirúa y Cañete, lo que es precisamente para facilitar labores de investigación que están a cargo del fiscal regional de La Araucanía y un equipo de persecutores.

Además, el delegado Toro agregó que las diligencias que estaría realizando la Fiscalía tienen que ver con posicionar a sujetos de interés en los sitios del suceso.

De ahí que no recogiera las críticas de las parlamentarias y la solicitud de remoción de Roberto Garrido como persecutor.

Cabe recordar que tanto el fiscal Nacional, Ángel Valencia, y también el subsecretario del Interior, Manuel Monsalve, han deslizado la posibilidad de que los autores de este brutal crimen podrían estar bajo la lupa de la justicia.