La familia del carabinero Alex Salazar, que murió atropellado hace un año en la Plaza España, cuestionó que la Fiscalía aún no cierre la investigación contra el imputado en la causa. El abogado querellante aseguró que las diligencias están agotadas y que hay suficiente prueba para llevar a juicio al responsable del homicidio.

Fue el 12 de marzo del año pasado cuando el cabo fue arrollado por un vehículo mientras su patrulla fiscalizaba una botillería que funcionaba en la madrugada frente a la sede del Gobierno Regional en la avenida Prat de Concepción.

El uniformado murió dos días después y por el homicidio fue imputado el ciudadano venezolano, Johyner Bonilla, criticando el abogado de la viuda, Hans Laurie, la demora del Ministerio Público en cerrar la indagatoria y llevar a juicio al responsable.

Esa postura fue respaldada por el senador Enrique van Rysselberghe, quien llamó a la Fiscalía a agilizar la investigación y sancionar a quienes asesinen a policías.

El parlamentario de la UDI lamentó, igualmente, la lentitud del gobierno, que, dijo, no ha comenzado a pagar las pensiones a las hijas del cabo muerto, a pesar de estar aprobadas desde el año pasado.

Actualmente la investigación tiene un plazo que vence el lunes, cumpliendo el imputado Jhoyner Bonilla, más de un año en prisión preventiva, denunciando la Defensoría vulneración de derechos de parte de Gendarmería al restringir las visitas al interno.