Sin formular cargos y después de tres años de investigación desformalizada, la Fiscalía comunicó la decisión de no perseverar en el llamado caso “Palo Blanco”, pesquisa que involucró a la Municipalidad de Chiguayante y un grupo de funcionarios, incluido el alcalde Antonio Rivas.
Fue ante el Juzgado de Garantía que se selló el fin de la bullada pesquisa, argumentando el Ministerio Público la inexistencia de antecedentes para imputar delitos en relación a una licitación por 70 millones de pesos para la organización de las Fiestas Patrias del 2017.
El proyecto fue adjudicado a Marco Gatica, quien aseguró haber sido utilizado como “palo blanco” por un tercer contratista, en supuesta complicidad con funcionarios municipales, a los cuales habría llegado parte de los dineros que debían ir a la celebración comunal.
La indagatoria por cohecho comenzó el 2020 con la querella de dos concejales, a la que se sumó después una segunda del Consejo de Defensa del Estado.
A su vez, los abogados del CDE se opusieron sin éxito al fin de la investigación, argumentando diligencias pendientes y que habían sido solicitadas a la Fiscalía.