Fiscalía formaliza por ocultamiento de mil millones en bienes a los dueños de la desaparecida fábrica de calzado Albano de Concepción, región del Bío Bío.

A raíz de lo anterior, los dueños de la fábrica quedaron con arraigo nacional, que recordemos, se declaró en quiebra el año 2018. Esa conducta dolosa ha impedido hasta ahora el pago a los acreedores, entre ellos los 141 empleados que trabajaban en la empresa de calzado.

En una audiencia ante el Juzgado de Garantía de Concepción, el Ministerio Público dio cuenta de todos los contratos suscritos por los hermanos Cristian y Jessica Aravena Rivas, dueños de Albano, y que tuvieron por objetivo pedir la liquidación de la compañía y al mismo evitar el pago de deudas.

Se trata de una conducta dolosa que ocultó un patrimonio de mil millones de pesos, subrayó el fiscal Patricio Aravena, y por eso la formulación de cargos.

Con esos argumentos, la Fiscalía pidió al Tribunal el arraigo nacional de los imputados, adhiriendo a la solicitud el abogado querellante, Francisco García, argumentando no sólo el daño causado a su clientes los trabajadores de la empresa de calzado, sino también las fallidas notificaciones en domicilios donde los hermanos no pudieron ser encontrados.

El abogado defensor, Marcelo Villena, intentó sin éxito evitar la cautelar de prohibición de salir del país para sus clientes, señalando al tribunal que no tienen la intención de evitar la acción de la justicia y que por el contrario, están negociando un acuerdo reparatorio que daría término a la investigación.

La jueza Milena Ubilla acogió finalmente el arraigo, medida cautelar que podría mantenerse durante los 10 meses otorgados como plazo a la investigación.