El abogado habló en exclusiva con Radio Bío Bío de Concepción, mientras espera la expulsión de su cliente decidida por el gobierno argentino, luego de su detención en Buenos Aires el sábado 12 de junio.
La medida no pudo concretarse al dar positivo para covid-19 el coronel en retiro Walter Klug Rivera, comenzado por eso una cuarentena que lo mantendrá en Argentina hasta que se recupere.
Esta fue su segunda fuga, luego de la de 2015, cuando aprovechando su doble nacionalidad chilenogermana, viajó a Alemania explicando el abogado defensor, José Antonio Villanueva, los motivos detrás de esas decisiones.
“El señor Klug fue mal juzgado por la Corte de Apelaciones y la corte Suprema, y bajo esa convicción este señor a su edad, con todas las enfermedades de base que tiene, intentó hacer esto”, enfatizó el abogado.
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Y es que, recordó Villanueva, el ministro que investigó el caso Endesa, Jorge Zepeda, absolvió a Klug por falta de pruebas, siendo revocada esa resolución por tribunales superiores, que impusieron la pena de 10 años de cárcel por los homicidios y secuestros de 23 trabajadores de las centrales Abanico y El Toro.
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Fue el ministro Carlos Aldana, de la Corte de Apelaciones de Concepción, quien logró la extradición de Klug en febrero de 2020, después de su detención en Italia, a donde había llegado en plan de vacaciones.
La solicitud no fue por el caso Endesa sino por la desaparición del alumno de la Universidad de Concepción, Luis Cornejo Fernández, causa en la que fue finalmente absuelto a fines del año pasado, siendo dejado en libertad.
El abogado defensor explicó que al estar pendiente aún la segunda extradición, los tribunales no pueden notificar la condena de Endesa y eso debería mantenerse incluso cuando Klug llegue a Chile desde Argentina.
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Las agrupaciones de derechos humanos han subrayado que si el ministro Mario Carroza, a cargo de notificar la condena del caso Endesa en su momento, hubiese solicitado la extradición junto con el ministro Aldana, Walter Klug habría ingresado a Punta Peuco en febrero de 2020 y nunca se habría fugado por segunda vez.