Hasta el punto de control de mando por la desaparición de Tomás Bravo en Caripilun, llegó personal del Servicio Agrícola y Ganadero (SAG) y la SIAT de Carabineros.

La presencia del organismo es a petición del Ministerio Público, aunque el fiscal José Ortiz no quiso entregar mayores detalles, afirmando que “por el momento no hay ninguna noticia que dar a conocer”.

Es preciso indicar que una de las hipótesis de los lugareños tiene que ver con la presunta presencia de un puma, lo que derivó en que muchos de los civiles que acudieron a apoyar las labores de rastreo, llegaran con la intención de cazar y matar al animal.

Dicha situación generó la molestia del intendente Patricio Kuhn, quien afirmó que más que colaborar, dichas acciones entorpecen las diligencias.

Por tanto, la llegada del SAG podría estar vinculada a la eventual presencia de un puma o para resguardar la fauna silvestre del lugar.

Durante la jornada, también la SIAT de Carabineros se entrevistó con la familia del menor. Todo en el marco de las indagatorias que desarrolla el fiscal Ortiz.