Detectives de la Bidema de la PDI, realizaron diligencias en Coronel en el marco de una investigación por la posible presencia de asbesto enterrado en la termoeléctrica Bocamina de Enel.
Según los denunciantes, pronto habrá excavaciones en la planta en busca de este elemento contaminante. En relación a la diligencias de la PDI, Enel comprometió su total colaboración.
La querella fue interpuesta el 2015 por los Trabajadores Unidos contra el asbesto, luego de conocerse el resultado de exámenes que arrojaron altos niveles de metales pesados en la sangre de un grupo de ellos.
En la acción legal responsabilizan a la planta termoeléctrica a carbón de estos indicadores. A cinco años de la denuncia, detectives de la Bidema de Temuco llegaron hasta Coronel, donde tomaron declaración al alcalde Boris Chamorro.
El abogado Cristian Pinto, director jurídico, indicó que la diligencia buscaba conocer qué acciones tomó la casa edilicia una vez enterado del análisis que hizo el laboratorio de química ambiental del centro nacional de medio ambiente.
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Omar González, vocero de los Trabajadores Unidos contra el asbesto y uno de los querellantes, dijo que el próximo paso es que la Bidema entrará a Bocamina a tomar muestras, también en los alrededores de la planta y en el vertedero de cenizas, todo esto, en busca de asbesto y metales pesados.
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Asimismo, Enel confirmó a La Radio que personal de la PDI realizó este jueves algunas diligencias en la planta, la que dijo contó con toda la colaboración del personal, aunque no detallo de qué pericias se trató.
Respecto de esta situación, Enel aseguró esta jornada que “Bocamina II, en funcionamiento desde octubre de 2012, se encuentra libre de asbesto desde su construcción”.
“El año pasado la autoridad sanitaria competente (Seremi de Salud) de la región del Biobío llegó a las instalaciones de Bocamina para tomar muestras en el lugar, luego de recibir denuncias sobre la posible presencia de asbesto. Luego de dos meses de análisis, la autoridad sanitaria entregó los resultados a Enel Generación, descartando por completo la presencia de asbesto en las instalaciones de Bocamina,” agregaron.
La posibilidad de que se haya enterrado asbesto en Bocamina es algo que también se ha analizado en la Comisión Investigadora de la Cámara sobre los actos del Gobierno en relación con la contaminación ambiental que afecta a la comuna de Coronel.
La generadora Enel, anunció en mayo pasado que con fecha límite 31 de diciembre de este año procederá a la desconexión de Bocamina I, cese de operaciones que estaba inicialmente previsto para 2023.
Por su parte, Bocamina II seguirá produciendo energía, pero también cerrará antes de lo previsto, en mayo de 2022.