La Corporación Cultural Baldomero Lillo se declaró en quiebra por la inactividad turística que se arrastra desde el año pasado en Lota, en la región del Bío Bío.
A causa de esto, más de 50 trabajadores fueron desvinculados y el resto se mantiene en incertidumbre ante el eventual término de contrato con Corfo.
Se trata de la administración del emblemático circuito Lota Sorprendente que reúne a miles de turistas cada año para visitar el patrimonio del parque de Isidora Cousiño, el museo histórico y la famosa mina Chiflón del Diablo.
Sin embargo, las manifestaciones sociales del año pasado, la huelga de los trabajadores que se extendió por un mes y medio, y la pandemia terminaron por provocar una debacle económica en la administración del circuito turístico.
Apoyo de Corfo
Así lo detalló el abogado de la corporación, Lautaro Benitez, quien agregó que hace 3 meses se solicitó un apoyo económico de Corfo, sin embargo, este no llegó.
Crisis económica que ya ha afectado a gran parte de sus trabajadores, ya que más de 50 fueron desvinculado. El presidente del sindicato, Gastón Ramírez, manifestó su preocupación, ya que el Chiflon del Diablo necesita la extracción de agua diariamente para evitar inundaciones.
Consultada al respecto, la directora de Corfo, Macarena Vera, indicó que están a la espera que el tribunal nombre al liquidador de los bienes, para dejar nuevamente en sus manos nuevamente el patrimonio lotino.
Desde la Corporación Baldomero Lillo agregaron que esperan que el tribunal declare el término de contrato de la concesión, la que pondría fin a una administración anticipada del circuito turístico más importante de la Región del Bío Bío.