La Municipalidad de Concepción emitió un comunicado informando la búsqueda de una significativa escultura mapuche tallada en madera que “desapareció” desde la Plaza de la Independencia.
En detalle, se trata de un Chemamûll que instalaron en la plaza quienes participaron en el acto de conmemoración de la muerte de Camilo Catrillanca en la tarde del jueves pasado.
Por lo mismo -y ante la denuncia en redes sociales sobre la desaparición de este ícono- el municipio hizo un llamado a quienes tengan información o hayan sacado esta figura a que la devuelvan o informen de su paradero, para poder recuperarla para las comunidades mapuches.
Fernando Ramis, encargado de Aseo Municipal, precisó que el jueves las cuadrillas de aseo nocturno y personal de servicios a la comunidad salieron alrededor de las 23:00 horas y se abocaron al levantamiento de la estatua de Pedro de Valdivia y adocretos, además de barrido.
“Podemos asegurar que ese día no encontramos ninguna figura mapuche, pero sí algunas varas o lanzas que recogimos con respeto, porque sabemos que cada elemento es un símbolo importante para nuestros pueblos ancestrales”, indicó.
El encargado de la oficina de Asuntos Indígenas, Orlando Salinas, señaló que “ese Chemamûll fue instalado por las distintas agrupaciones mapuches de Concepción y fue retirado por personas que no conocemos; y no sabemos dónde está en este momento”.
“Eso es muy preocupante para nosotros como municipio, porque es muy simbólico y parte importante de su cosmovisión, así es que hay que tratar de recuperarlo”, subrayó.
Por ello, Salinas pidió que quienes tengan información o la misma figura en su poder la devuelvan a la brevedad a una agrupación mapuche si tienen contacto con alguna de ellas, o a la Oficina de Asuntos Indígenas, ubicada en calle Chacabuco con Caupolicán.
Cabe señalar que paralelamente, la Dirección de Seguridad Pública está haciendo una revisión de las cámaras de seguridad en el sector para ayudar en la indagación.
La palabra Chemamûll significa “gente de madera”. Los mapuches los utilizaron hasta las primeras décadas del siglo XX en los ritos realizados durante el velorio de los muertos.
De acuerdo a su cosmovisión, los Chemamûll vigilan impertérritos el sueño de los que ya han partido.