El abogado Remberto Valdés renunció en la noche del lunes como director del Teatro del Bío Bío, esto en medio de una disputa entre parte del directorio y funcionarios, la que incluso ha llegado hasta tribunales. En su carta de renuncia, Valdés apuntó a la falta de orden, disciplina y amor real por trazar y concretar objetivos, entre otras cosas.

Tan sólo la semana pasada se había conocido otra polémica, con la denuncia por fraude presentada por el presidente del directorio, Juan Eduardo King, contra la jefa de Finanzas y Administración, quien cumplía labores en forma paralela en la Universidad de Talca.

Este lunes renunció como director Remberto Valdés, quien en la carta correspondiente apuntó a una mala relación con los “recursos humanos” del Teatro Regional.

“Señalar que la tarea en pro de la Cultura y de las Artes que me mandataron se tornó imposible de obtener, dadas las magras condiciones del TRBB en cuanto a orden, disciplina y amor real por trazar y concretar objetivos, más allá de las pequeñas prebendas y a
la muy mala relación con los recursos humanos de la corporación que, estimo, fueron regalados de manera dispendiosa en perjuicio de esta Magna Obra”, afirmó.

En tanto, anoche desconocidos colgaron un lienzo en el frontis reclamando la salida del directorio del propio Valdés, así como también de Juan Eduardo King y Héctor Campos.

Juan Eduardo King no quiso referirse al tema, pero sí Omar Valderrama, presidente del Sindicato de Trabajadores del Teatro Bío Bío, quien afirmó que desconoce el origen del afiche y que no tiene relación con el sindicato. Además, manifestó molestia por la falta de diálogo que ha existido con el directorio.

Quien también se refirió a la situación actual del teatro fue el consejero regional Luis Santibañez, quien lamentó la renuncia de Valdés y solicitó a las partes prudencia para poder encontrar el diálogo que hoy se mantiene tenso al interior del recinto cultural.

La salida de Remberto Valdés, uno de los 11 directores hasta ayer, llega en la víspera de una nueva reunión de directorio agendada para mañana, donde debieran tomarse decisiones administrativas y corporativas.

La carta completa de Remberto Valdés a continuación: