La justicia declaró culpable a Andrés Larraín por las lesiones a su polola, Antonia Garros, en diciembre de 2016, dos meses antes de que ésta perdiera la vida al caer del departamento de su entonces pareja. La madre de la joven siempre denunció que la muerte de su hija se debió a la violencia que caracterizó la relación con el ahora condenado.
El juicio concluyó con un veredicto condenatorio, tras acreditar la Fiscalía y los querellantes su responsabilidad en la agresión que Antonia Garros denunciara dos meses antes de su muerte.
Para María Consuelo Hermosilla, madre de Antonia, se trata de una resolución que por fin confirmó la violencia de la que fue víctima su hija durante su relación con Larraín y que ha insistido fue el detonante que llevó a la joven a lanzarse del departamento de su pareja en febrero de 2017 en medio de una pelea.
Andrés Larraín arriesga una pena máxima de menos de un año de cárcel por el delito de lesiones menos graves, sanción que podría ser cumplida en libertad, explicando el abogado Andrés Cruz, que eso va a depender de lo que determine el tribunal.
No obstante la baja pena, la madre de la víctima dijo que aceptará lo que señale el fallo, pero subrayando que con el veredicto condenatorio se conforma.
Sobre la resolución del tribunal, la abogada defensora, Paula Villalobos, comprometió un pronunciamiento para la tarde, aunque la decisión de un eventual recurso de nulidad se decidirá probablemente tras conocer los fundamentos de la sentencia, cuya lectura fue programada para el próximo sábado.
La defensa anteriormente ya había descartado la denuncia, e incluso dio cuenta que quien fue realmente agredido fue el acusado a manos de su polola.