La construcción del proyecto inmobiliario Jardín Nativo en uno de los accesos a Andalué en San Pedro de la Paz está paralizada desde el pasado viernes 24 de mayo por el municipio sampedrino, luego de que se detectara que la constructora cortó arboles en una zona que no estaba contemplada.
El director de Obras, Patricio Bernal, explicó que la paralización se mantendrá hasta que la empresa presente un estudio que indique que no existen riesgos asociados a la intervención que realizaron.
“Ellos definían que no se sacaban algunas especies arbóreas, ni se retiraba alguna cubierta vegetal, no obstante lo hicieron, por lo tanto, eso fue lo que nosotros supusimos que podía haber algún tipo de afectación contra terceros”, aseguró Bernal.
El proyecto ya había generado preocupación entre los vecinos por su ubicación. En ese momento, la representante de la Organización Funcional San Pedro Unido manifestó sus inquietudes y, ahora, son los moradores del sector quienes dicen que los trabajos que ahí se realizan influyeron en la inundación que se registró el pasado fin de semana en la calle Las Encinas, según lo indicó Marcelo Bersano.
“Es un muro de contención gigante que están haciendo y que claramente van a tener una hermosa vista la gente que tiene esos edificios, pero las mitigaciones están bastante lejos y nos complicaron bastante estos días, y espero que en este próximo frente no nos complique”, expresó.
Desde el municipio, el director subrogante de Aseo y Ornato, Cristián Ortiz, señaló que no pueden asegurar que los trabajos en la estructura hayan influido en la inundación, eso sí indicó que están tomando los resguardos para abordar la situación en ese sector y en otros de la comuna.
“Nosotros igual hemos estado haciendo un trabajo desde antes limpiando las hojas y recogiendo en los lugares, pero producto de esta temporada de otoño, siempre hay que estarlas removiendo de forma constante y en eso hemos estado preocupados de atender los 28 puntos de los cuales tuvimos anegamiento”, aseguró.
Los puntos críticos de la comuna están en Lomas Coloradas, camino a Santa Juana, Candelaria, donde existe riesgo de anegamiento.