Los conscriptos detenidos la noche de este martes, en el marco de la investigación por el robo de dos fusiles de guerra en el Regimiento Chacabuco de Concepción, habrían tenido la intención de vender el armamento sustraído.
De acuerdo a fuentes de Radio Bío Bío, los centinelas tenían como objetivo comercializar dichas armas con un valor de dos millones de pesos cada una, aunque una de ellas ya fue recuperada.
Por su parte, el Gobernador de Concepción, Robert Contreras, calificó el vuelco del caso que quedó en manos de la Fiscalía Militar como “preocupante”.
“El fiscal militar está determinando en este minuto las diligencias y pertinencia de la detención, y en base a eso podremos tener mayores antecedentes”, manifestó Contreras.
En esa misma línea, el gobernador apuntó que al ser armamento de guerra y funcionarios del Ejército los involucrados, la Fiscalía MIlitar -por medio del Código Penal- tiene las “atribuciones para determinar las sanciones y realizar las investigaciones pertinentes”.
La aprehensión de los conscriptos ocurrió luego que la policía uniformada recuperara uno de los fusiles en calle Las Heras de Concepción.
Tras ello, Carabineros dispuso un operativo conjunto del OS7, OS9 y el Labocar en la comuna de Penco, específicamente en el sector El Refugio, donde allanaron tres viviendas.
Además, las diligencias dejaron un tercer detenido (un civil), quien será formalizado durante la mañana de este miércoles.
De acuerdo a las primeras informaciones entregadas luego de ocurrido el ilícito, los soldados en cuestión fueron atacados por cuatro desconocidos, resultando Cristián Quiñones Gaete con una herida cortopunzante de dos centímetros en uno de sus muslos, mientras que su compañero, Cristián Ruminot Martínez, quedó con una contusión facial.