Un sobreseimiento temporal decretó la Corte de Apelaciones de Concepción en el caso del sacerdote y académico Hernán Enríquez, denunciado por la supuesta violación de un exseminarista. El tribunal revocó así la resolución de primera instancia que había aplicado un cierre definitivo al sumario.
Tras escuchar los alegatos de la defensa y revisar los antecedentes del proceso, los ministros de la Quinta Sala de la Corte de Apelaciones penquista aprobaron el sobreseimiento que se había dictado en favor del prelado.
La investigación había sido cerrada por la jueza Margarita Sanhueza, del Primer Juzgado Civil, resolución respaldada por la defensa del sacerdote, a cargo del abogado Raúl Bustos, quien planteó al tribunal de alzada tres argumentos para que se mantuviera el sobreseimiento definitivo que impedía una eventual reapertura del caso.
Sin embargo, los ministros siguieron la sugerencia de la Fiscalía Judicial, quien había propuesto dar el carácter de temporal al sobreseimiento del sumario contra Enríquez, lo que permitiría -si se entregaran nuevos antecedentes- reabrir la investigación en el futuro.
El abogado Bustos reconoció su disconformidad con el fallo de la Corte de Concepción, deslizando que pudo influir el actual clima contra la Iglesia Católica y el desprestigio de sus miembros a raíz de las denuncias por abusos sexuales contra menores.
La denuncia contra el religioso y académico de la Universidad Católica de Concepción fue presentada únicamente por el padre del exseminarista, sin que la supuesta víctima haya querido nunca ratificarla e incluso negándose a declarar ante la justicia, lo que llevó a que la magistrada Sanhueza a dictar el sobreseimiento ahora ratificado.