Diez árboles nativos fueron destruidos en el Parque Urbano Estero Quilque de Los Ángeles junto a sus placas descriptivas. Los árboles, tal como se aprecian en las fotografías, no eran de avanzada edad y prometían ser parte del futuro pulmón verde de la ciudad.
Frente a este hecho, el municipio local, encargados de la mantención de este espacio público, llamó a denunciar a la brevedad a quienes sean vistos realizando este tipo de actos, ya sea en este lugar o en otros de la comuna.
Por su parte, el concejal de la Democracia Cristiana y presidente de la Comisión de Medioambiente del Concejo Municipal, Eduardo Velásquez, lamentó la situación y afirmó que “todo tipo de acción que quería dañar este parque constituye un acto de vandalismo“.
En tanto, la Municipalidad también reprochó el acto, manifestando que les duele mucho este destrozo, no sólo por el impulso al pulmón verde de la ciudad, si no también por ser nativos y propios de la zona.
Finalmente, señalaron que “es un daño hacia todos los angelinos (y anunció que) los volveremos a plantar nuevamente con la esperanza que jamás vuelva a suceder“.