El presunto autor del crimen de los tres hermanos en Lota era un amigo de la infancia de las víctimas y de acuerdo a su defensor, actuó en legítima defensa.

El control de detención se cumplió en el Juzgado de Garantía de Lota, sólo con presencia de un familiar del imputado Francisco Vallejos Candia de 26 años, ya que los cercanos de las víctimas arribaron tarde.

El tribunal declaró legal la detención y el fiscal, en virtud de diligencias pendientes y a la espera de los informes de las tres autopsias, solicitó ampliar la detención en 48 horas, por lo que la formalización se cumplirá este martes.

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Pero el defensor penal, Marco Inostroza, anticipó una teoría hasta ahora desconocida: que su representado actuó en defensa propia, porque los hermanos Meza-Burgos le habrían robado y amenazado.

El fiscal Julio Sánchez entiende que el episodio obedece a algo circunstancial, no planificado, y que los crímenes ocurrieron en un sector conocido por la venta de drogas.

Los familiares de Jorge Iván, David Eduardo y Moisés Alberto no encuentran consuelo, piden justicia y también comprender los motivos del supuesto homicida, quien era amigo de la infancia de las víctimas. Un vecino, según expuso una tía de los fallecidos.

Una hermana de las víctimas aseguró que rogaron por sus vidas, pero el hombre los mató igual.

Personal de Labocar de Carabineros encontró un revólver marca Taurus calibre 38 en el humedal colindante con el sector La Vega, a pocos metros de la casa del detenido, además de cuatro cartuchos balísticos del mismo calibre. Correspondería al arma homicida, que tenía encargo por robo de la comuna de Maipú.

También se indaga quién trasladó a los moribundos hermanos -dos con antecedentes policiales- hasta el Hospital de Lota, a cuyo ingreso sus cuerpos fueron arrojados. El detenido también posee antecedentes prontuariales.