Como un negociado y especulación inmobiliaria fue calificada la venta de terrenos por parte de la Armada a un privado en Talcahuano, y que después volvieron al Fisco a un precio 50 veces mayor.
Durante el primer gobierno de Michelle Bachelet, la Armada vendió a la Inmobiliaria Dresden un paño de la Península de Tumbes a 4 millones de pesos la hectárea, para que después -en 2011- el Serviu recomprara parte del terreno a 200 millones de pesos la hectárea.
En el lugar se construyó el proyecto de reconstrucción Mirador del Pacífico, para damnificados del 27/F, hoy sometido a una millonaria reparación por fallas constructivas, lo que el diputado Marcelo Chávez decidió pedir la intervención de dos organismos.
De acuerdo también con que el tema sea investigado se mostró la senadora UDI, Jacqueline van Rysselberghe, bajo cuya gestión como intendenta del Bío Bío se concretó la compra que el Serviu hizo de los terrenos, aunque subrayando en que se indague la primera venta efectuada el año 2008.
Pero todos estos negocios han sido ya denunciados desde hace tiempo por el residente de la Península de Tumbes y dirigente de los trabajadores de Asmar, Cristian Lagos, al Ministerio de Defensa y a la Contraloría, incluyendo también lo que califica como una ilegal explotación de bosques en el lugar.
En Concepción, los antecedentes sobre las compraventas de terrenos de la Armada serán entregados el miércoles próximo al Consejo de Defensa del Estado por el seremi de Bienes Nacionales, Eric Aedo.