Preocupación generó el progresivo aumento de los contagios de la denominada “bacteria asesina”, infección cuyo nombre es Streptococcus Pyogenes y que en combinación con la influenza puede resultar mortal.

En ese sentido, el último informe del Instituto de Salud Pública mostró un nuevo alza y en lo que va del 2024, hay 306 cepas confirmadas a nivel nacional.

Cabe mencionar que, sobre el lugar de procedencia de estas cepas, el 51% corresponden a la Región Metropolitana, el segundo lugar lo ocupa la de Valparaíso, con un 9% del que la mayoría de casos corresponde a recintos del Servicio de Salud Valparaíso-San Antonio y Viña del Mar-Quillota.

Cabe señalar que, a nivel nacional y local, las cifras llevan meses superando récords.

Este miércoles, la ministra de Salud, Ximena Aguilera, aseguró que como cartera se mantienen y se mantendrán en estado de alerta, ya que en el país, van al menos cinco muertes este año a causa de esta coinfección.

Además, los expertos coinciden en que la vigilancia y seguimiento son claves para impedir que se propague. Así lo explicó Jorge Olivares, profesor del Instituto de Biología de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso.

Si bien, no abordó directamente los programas de vigilancia en la región, la secretaria regional de Salud, Lorena Cofré, dio algunas recomendaciones para detectar oportunamente esta bacteria.

“Se debe consultar toda vez que se tenga cefalea intensa, fiebre, dolor de garganta, o incluso pequeñas ampollas en las manos, por lo que en esos casos se sugiere no ir al trabajo o a la escuela”, afirmó Cofré.

A su vez, el Instituto de Salud Pública concluyó en su último informe que se deben fortalecer las “estrategias de prevención, detección precoz, tratamiento efectivo, vigilancia epidemiológica y de laboratorio”.

Asimismo, se detalla que entre los pacientes de mayor riesgo se encuentran quienes sufren de enfermedades de base, menores de 10 años y mayores de 60.